Redacción El País
El delantero brasileño Luiz Henrique, estrella del Botafogo campeón del Brasileirão y la Copa Libertadores de América en 2024 y elegido "Rey de América" luego de ganar con comodidad la encuesta América le responde a El País con el 52% de los votos, deja el fútbol sudamericano tal cual se prevía y ya emprendió destino europeo para jugar en este 2025.

El talentoso atacante de 24 años viajó el sábado pasado hacia Doha (Qatar) para realizarse los exámenes médicos e incorporarse a los entrenamientos del Zenit de San Petersburgo (Rusia), que habría pago 35 millones de euros por su ficha, según informó el medio brasileño Globo Esporte.

No obstante, el club ruso no publicó oficialmente el costo de la transferencia y otros medios, como por ejemplo EFE, manejaron que cifra final fue un poco menor: 33 millones de euros.

Según indica el comunicado oficial del vigente campeón del fútbol ruso, el futbolista firmó contrato por cuatro años hasta diciembre del 2028, con opción a extenderse por uno más hasta finales del 2029.

En la misma línea, Botafogo se despidió del jugador con un emotivo mensaje en redes sociales: "Pantera Negra marcó su nombre en la historia del Clube Mais Tradicional con su zurda mágica y mucha irreverencia".

"Un talento futbolístico poco común, que hizo sonreír a millones de amantes en la tierra y en el cielo. Desde arriba, nuestra constelación se sumó a la celebración, incluido el eterno dueño de la poderosa camiseta número 7: ¡Garincha!", expresaron en el mensaje.

O "Rei da América", como reza el tatuaje que se hizo en su pierna junto a la Copa Libertadores obtenida el pasado 30 de noviembre, dijo en entrevista exclusiva con Ovación que para el 2025 esperaba hacer un mejor año que el que pasó porque es un jugador "para cada año estar mejorando, estar en alto nivel siempre, para jugar en equipos de alto nivel también".

Surgido de las formativas de Fluminense, emigró a joven a Europa para jugar durante una temporada y media para el Real Betis de Sevilla (España), y regresó a Rio de Janeiro en febrero del 2024 para sumarse a las filas del Fogão a cambio de 20 millones de dólares. Un año después, Botafogo recuperó por demás esa inversión, que además le valió la primera Libertadores de su historia. Un negocio redondo desde todo punto de vista.

En el año que dejó su huella para siempre en la historia del Fogão también debutó en la selección absoluta de Brasil, algo que definió como un sueño que lo motiva por un objetivo más ambicioso: "Quiero jugar en esta Copa del Mundo (2026) y quiero ganar también con Brasil. Soy un jugador que siempre que hay cosas adelante mío las quiero conseguir, yo quiero que en 2026 tanto yo como Brasil hagamos todo como para ganar esa Copa del Mundo", dijo también a Ovación.

Foto: Botafogo.