Promediaba el segundo tiempo en el Gran Parque Central, el calor de la tarde ya se había esfumado y un globo blanco seguía en el campo de juego, unos metros más adelante de Luis Mejía. Como si no le importara la brisa que se hacía sentir en la cancha, se mantuvo inmóvil como si fuera un defensor más, increíblemente en la zona del campo donde jugaba Juan Manuel Izquierdo. Creer o reventar, pero ¿cómo un globo que había sido tirado por los hinchas una hora antes continuaba en la cancha del GPC? Sin duda fue una señal. Una señal de que el zaguero sigue estando en este mundo. Continúa presente, pero de otra manera. Su recuerdo hizo que todo el estadio cantara “ni la muerte nos va a separar, desde el cielo te voy a alentar”. También provocó uno de los minutos de silencio más ensordecedores que se recuerde en Uruguay. Sí, porque el silencio también puede provocar esa sensación, tan contraria a lo que realmente significa.
“El partido de hoy (por ayer) se sufrió. Desde que llegamos hasta que terminó. Ningún jugador estaba en su máximo potencial”, subrayó el técnico Martín Lasarte tras el 1-0 de Nacional a Liverpool 12 días después del fallecimiento de Izquierdo. Cómo no sufrirlo, si hasta su capitán Diego Polenta dudó si iba a ser capaz de jugar, en un hecho que admitió en la conferencia previo al encuentro. Ese mismo referente que fue fundamental acompañando a la familia de Juan, y que fue a cada pelota como si estuviera jugando con él al lado. Un capitán que fue capaz de decir sin sonrojarse “el grupo me vio devastado. En esta semana fue la primera vez que entré a la cancha, no me sentía con ganas ni con fuerza”.
Minuto 42. Gol de Nicolás López. Celebración medida y festejo mirando al cielo. Esa fue la diferencia en el marcador entre un Nacional al que se lo vio en algunos momentos falto de ritmo (natural) y algo impreciso, y que tuvo en la entrega de Diego Polenta, Leandro Lozano y Christian Oliva como a sus exponentes más altos, así como el juego del Diente, que primero estuvo volcado a la derecha y que después, ante la salida de Ruben Bentancourt, jugó el complemento como nueve.
“El mejor homenaje que le podemos hacer es ganar todos los partidos y ser campeones uruguayos. De esa forma Juan sería tricampeón”, afirmó el presidente Alejandro Balbi todavía en el GPC. Eso es lo que van a buscar todos en Nacional, y seguramente Juan va a empujar y va a estar presente en la búsqueda del objetivo, así como ayer estuvo con ese globo. Ese mismo globo que se paseó por la cancha de un lado a otro cuando el silencio se adueñó del estadio antes de empezar.
Mientras se desarrollaba el minuto de silencio previo al comienzo del partido, un globo se hizo presente de un lado al otro, con los futbolistas formados.
Cuando el silencio habla… pic.twitter.com/d2Om4Jix8T
— Juan Pablo Romero (@jpromeroh) September 8, 2024
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