Redacción El País
Por la tercera fecha de la fase de grupos de la Copa Conmebol Libertadores, a Peñarol le tocó visitar al Atlético Mineiro en el Arena do Galo, donde no la pasó bien desde el primer minuto de juego.

El partido comenzó cuesta arriba cuando a los 15' Gustavo Scarpa anotó el primero. Peñarol no encontró la pelota en prácticamente todo el primer tiempo y el local dominó el trámite con velocidad y vértigo, pero el segundo gol llegó por un error propio en salida.

Guillermo de Amores sacó desde el arco en corto para el volante Damián García, que se acercó hasta el área para salir jugando por abajo, pero ante la presión de Paulinho y Hulk, perdió la pelota de forma insólita y el primero definió cruzado ante un arquero sorprendido y prácticamente vencido.

Si bien en la previa ya era considerado un partido complicado, incluso el más difícil de toda la fase de grupos, recibir un gol de esta forma es un baldazo de agua fría para los aurinegros.