Redacción El País
Después de la victoria del último martes ante Deportivo Táchira, el presidente de River Plate argentino, Jorge Brito, cazó el teléfono y llamó a un uruguayo que es considerado ídolo en el club, con la idea de que visitara el próximo jueves el Monumental de Núñez en ocasión del partido ante Nacional por Copa Libertadores.

El titular se volvía de Venezuela junto al mánager Enzo Francescoli —otro de los elegidos con esa distinción— cuando entonces decidió dirigirse a Antonio Alzamendi, con "mucho respeto", para ofrecerle asistir como invitado, informó a Ovación el exfutbolista.

"Gracias a Dios, tengo una muy buena relación. En el momento en que yo lo llamo él siempre está presente. Me invitaron y les dije que sí", reconoció, entusiasmado. "Estoy agradecido por la invitación. Es algo que en su momento rechacé por muchas cosas, pero me sentí muy bien respetado por el presidente".

Su visita se dará en un contexto especial. No solamente porque pasaron nueve años de la última vez que estuvo por Núñez (final de la Libertadores 2015 ante Tigres), sino porque, además de que el estadio fue remodelado, su hijo estará representando a la vereda de enfrente.

Juan Manuel Alzamendi, a diferencia de su padre —que se define como hincha de Peñarol—, es fanático de Nacional, club para el que trabaja como preparador físico. También hija y nuera del histórico exjugador de 67 años estarán del lado tricolor, en ambos casos desde la tribuna visitante.

Pese a la diferencia en los colores entre uno y otro, el ídolo de River no hace distinción y tiene claro que, para él, primero está la familia. Incluso, dice no creer haberle confesado al entrenador Álvaro Recoba y a su ayudante Nelson Abeijón que ha gritado goles de Nacional: "Lo que más deseo es que a mí hijo le vaya bien. Yo soy de Peñarol, pero acá cuando juega Nacional, cuanto más bien le vaya a mi hijo, mejor. Ni hablar de que yo tengo un sentimiento inmenso por River, pero no creo que a ningún padre le gustaría que a su hijo le vaya mal".

Juan Manuel es uno de los hijos que le salieron hinchas de Nacional. También tiene uno de Boca, otro de Independiente y dos de River. "Son decisiones de cada uno. Hay tres que somos de Peñarol, y dos de Nacional".

Leonardo Maine/Archivo El Pais

Con River argentino, el uruguayo convirtió el que, probablemente, sea uno de los dos goles más importantes de los 122 años de historia que tiene el club. Fue el 1-0 ante Steaua Bucurest de Rumania para ganar la Intercontinental por primera y única vez. "Tuve la fortuna porque era delantero y normalmente es el que tiene que hacer los goles. No estoy en eso de cuál fue el mejor. Sé que es el único que logró una copa del mundo y fue una de las cosas más grandes que me pasó en el fútbol, sin duda".