Quiso festejar el título del Torneo Apertura y Peñarol lo jugó con la seriedad habitual, pero fue la ocasión perfecta para que Diego Aguirre le diera la oportunidad a los que suelen jugar con menos frecuencia.
La Fiera dispuso un once alternativo ante Progreso, una de las revelaciones del certamen, y en los primeros minutos sufrió algún arrebato ofensivo del Gaucho por la banda izquierda, donde la visita aprovechó las proyecciones de Byron Castillo para hacer daño por intermedio de Nicolás Fernández.
Sin embargo, pasados los 15 minutos se dio la lógica y el aurinegro acaparó el protagonismo. A los 16‘ , Nahuel Suárez dio rebote ante el remate de Ignacio Sosa y José Neris se lo perdió debajo del arco, aunque ya nada valía porque estaba inhabilitado.
Facundo Silvera se encargó de advertir al anfitrión con un centro cerrado que obligó a Randall Rodríguez a estirarse sobre el segundo palo, y luego Matheus Babi pudo haber puesto la ventaja con un cabezazo potente tras el centro de Diego Sosa.
En el momento donde Progreso generaba menos peligro, logró hacer la diferencia a los 43‘: Nahuel Herrera la perdió en la salida, Fernández hizo una jugada de lujo de izquierda a derecha y remató con vehemencia, pero Gianoli se interpuso y terminó anotando en contra. Aguirre, que dejó fuera de la convocatoria a figuras como Leo Fernández, Gastón Ramírez y Eduardo Darias, mantuvo a todos sus elegidos para el complemento. Y ya de arranque sometió al rival buscando preservar el invicto: a los 52’ la armaron entre Franco González y Babi para que terminara definiendo Ignacio Sosa con un remate cruzado que contuvo Suárez en dos tiempos.
En la jugada siguiente, el protagonista de ese ataque debió haberse ido expulsado por una dura falta, pero fue amonestado. Para la última media hora ingresó el juvenil Tomás Olase, Nahuel Acosta, Speedy González y Lucas Hernández, que acto seguido levantó el centro que derivó en el 1-1 anotado por Leo Coelho.
Por si algo le faltaba al brasileño, Gianoli la bajó en el primer palo y él definió en el segundo para dar vuelta el partido a 20’ del final. En tiempo de adición, Lucas Hernández estampó el 3-1 definitivo. La primera parte del plan de Aguirre le salió bien: rotó al equipo, ganó el quinto al hilo y está a un partido de ser campeón invicto del Apertura. Para concretar la segunda deberá empatar o ganar el martes ante Rosario Central para pasar a octavos de final de la Libertadores.