Redacción El País
Liverpool y San Lorenzo se enfrentaron por Copa Libertadores en un partido que terminó 3-2 a favor del Ciclón y dejó un mal sabor de boca en el equipo negriazul por más de una jugada polémica que pudo cambiar el resultado del partido. La Conmebol, en los audios del VAR, reconoció un error en una de las jugadas que protestó el equipo uruguayo.

Sobre la media hora de juego y en mitad de cancha, Elián Airala tuvo una entrada muy dura sobre el jugador Diego Rodríguez a la altura de su tibia. El árbitro venezolano Ángel Arteaga, cerca de la jugada, resolvió solo amonestar al jugador del equipo argentino.

A los 41 minutos, la polémica más determinante del encuentro. Mientras el partido estaba 1-1, Alexis Cuello, de San Lorenzo se tiró con vehemencia sobre Diego García de Liverpool y le cometió una dura infracción desde atrás. El jugador del Ciclón, que nueve minutos más tarde marcó el 2-1 para su equipo, solo vio la tarjerta amarilla.

Y hubo una tercera jugada que reclamó el equipo negriazul. Martín Barrios recibió otra dura falta, esta vez producto de una entrada de Eric Remedi que se lanzó con la pierna extendida. Para el árbitro Arteaga ni siquiera fue falta.

La televisión argentina analizó las jugadas apenas terminó el partido y coincidió con los reclamos de Liverpool pero faltaba escuchar la voz oficial.

Finalmente Conmebol publicó los audios del VAR del partido pero solo analizó dos jugadas. La correcta expulsión del zaguero negriazul Matías de los Santos en los descuentos del partido y la jugada entre Alexis Cuello y Diego García a la media hora de juego. En este caso, reconocieron un grave error del árbitro venezolano Ángel Arteaga que pudo cambiar el resultado del partido.

"En una disputa por el balón, un jugador de azul y rojo arremete contra un adversario por detrás, en el aire, utilizando ambas piernas con fuerza excesiva, jugando con excesiva dureza y poniendo en peligro la integridad física del adversario lo que se configura como tarjeta roja por juego brusco grave", concluyó el análisis del videoarbitraje de Conmebol y reconoció el grave error de su equipo arbitral.

La jugada fue determinante porque el futbolista de San Lorenzo que debió haber recibido la tarjeta roja marcó un gol minutos después para romper el empate y, de haber sido expulsado, habría dejado a su equipo con un jugador menos por más de 45 minutos.

"El VAR en su chequeo protocolar, utilizando ángulos y velocidades, no evalúa las consideraciones correctas del juego brusco grave", reconoció Conmebol y publicó los audios de las conversaciones entre el árbitro venezolano Ángel Arteaga y sus colegas en el que el juez sugiere amonestar y dice "pantorrilla nomás".

En la próxima fecha del grupo, San Lorenzo deberá visitar a Palmeiras, ya clasificado, mientras que Liverpool está obligado a ganar en su viaje a Ecuador para enfrentar a Independiente del Valle.