VIOLETAS
El plan a ejecutar debe respetando el ADN violeta, forjar un equipo con el 80% de los chicos nacidos en el club y buscar consolidarse en Primera.
Les entregaron el equipo sin exigencia: Fue un “hagan lo que puedan”. Y pudieron. Lo llevaron al lugar que por historia merece: la A. Hoy, tanto Gerardo Miranda como Héctor Rodríguez, saben que el ADN de Defensor Sporting tiene que volver. Que la Viola tiene que ser, otra vez, ese equipo duro y difícil para todos.
“Tuvimos un año complicado con el descenso y ascenso, los problemas internos que hubieron en el club y en el plantel. Todo eso llevó a que el club mirara hacia abajo donde estábamos con Héctor, el profe Fernando Morales y con Joaquín Rullán como entrenador de goleros y nos dieron la responsabilidad. Fue sin ningún tipo de presión, que condujéramos el barco hasta el final de temporada y si lográbamos el ascenso mucho mejor. Por suerte se logró así y ahora trabajando para este año que va a ser muy difícil, pero convencidos hacia dónde queremos ir”, comentó Miranda a Ovación.
Sanear al club es una tarea primordial
“Vamos a salir adelante. El club está apretado, pero lo vamos a sanear”, confesó a Ovación el presidente de Defensor Sporting Alberto Ward.
Con presupuesto global, de toda la institución, del orden de los 400 mil dólares, la tarea primordial es la de “ser muy medidos”. Y esa historia empieza a escribirse por decisiones tan firmes como la de volver a las raíces. “En el primer día de entrenamiento 30 de los 33 jugadores eran producto de las formativas del club”. La estrategia es clara: “Hay que quedar en Primera, potenciar a los juveniles y llegar a una copa. Para un club como nosotros, que tenemos varias puntas, estar en la A es fundamental”, sentenció el titular de los violetas.
El ayudante técnico fue claro “la idea básica es quedarse en Primera, después entrar alguna copa, dependiendo de como vaya el torneo y el año ir por el campeonato”.
Para cumplir esos pasos lo primordial es “saber de dónde venimos, dónde estamos parados y a dónde queremos ir. Obviamente que tenemos que volver a que el 80% de los jugadores sean de las formativas y por eso ahora en lo que estamos es en la construcción de acompañar a esos chicos con gente que ya haya tenido una experiencia en Primera”.
Cinco fichajes porque no van a tapar a los juveniles
Fernando Elizari (Cerro) fue el primer fichaje para los violetas, que recuperan jugadores, como Luciano Boggio (River Plate). Renovaron Joaquín Valiente, Facundo Mallo, Agustín Sant’Anna y el “Chino” Álvaro Navarro. Llegaron también Gonzalo Andrada (Progreso) y Diego Coelho (Cerro). Casos a resolver porque regresaron: Damián Silva, Ramiro Méndez, Samuel Rodríguez, Owen Falconis, Joaquín Avilés.
La B fue “un aprendizaje total para los chicos del club, porque hubo partidos muy duros” y ahora viene el respetar el ADN. “Tenemos una visión de que queremos el juego de buen trato de pelota, recuperar el balón lo más rápido y lo más arriba posible de arco rival y después que nuestros jugadores de buen pie jueguen para llegar por distintas vías al arco rival. Lo que tenemos claro es el ADN del club, que Defensor siempre fue un rival difícil para todos y por ese camino queremos ir”.
Vendrán más fichajes, pero medidos, “porque no queremos tapar a nuestros juveniles, no queremos tampoco tener una cantidad de jugadores para ver qué hacemos después con ellos. Con Héctor hemos hablado de incorporar cuatro o cinco jugadores, va por ahí. Uno por línea y no más”.