TORNEO APERTURA
Tienen la particularidad que dos fueron de José Burgos el domingo a la noche y otros tantos de la terna encabezada por Daniel Rodríguez este lunes.
Si hay algo en lo que todo el mundo coincide es en que este empate 0-0 entre Nacional y Liverpool por la tercera fecha del Torneo Apertura fue un partido raro. Comenzó el domingo a la noche, se suspendió por la inundación del campo que provocó el temporal que le pegó a Montevideo y se completó un día después con distinto árbitro.
José Burgos tuvo que viajar al exterior como parte de la cuarteta uruguaya que el miércoles dirigirá el partido Audax Italiano-Estudiantes de La Plata por Copa Libertadores y su lugar lo ocupó Daniel Rodríguez, quien era el cuarto árbitro el domingo a la noche. Para seguir con el tema de las cosas en común, a los encargados de administrar justicia los unió algunos fallos polémicos los cuales, en general, fueron en contra de Nacional y que incidieron notoriamente en el resultado del partido.
Estas son las cuatro jugadas que los tricolores reclaman por sentirse perjudicados:
Hernán Figueredo, capitán de Liverpool, fue saltó en su área para tratar de rechazar una pelota y compartió el salto con un rival y un compañero. En el aire chocó contra ambos y quedó desestabilizado. Como consecuencia de eso, estiró su brazo izquierdo para encontrar equilibrio y terminó rechazando la pelota con el puño. El árbitro Burgos estaba bien ubicado, de frente a la pelota, y nada señaló. Era penal.
Sebastián Lentinelly, arquero de Liverpool, salió casi hasta el borde del área para despejar una pelota con el puño y luego de hacerlo chocó con Juan Ignacio Ramírez y cayó al piso. El balón derivó a los pies de Manuel Monzeglio, quien disparó y anotó. La jugada ya no valía porque antes Burgos había señalado falta del Colo contra el arquero. El jugador se había quedado quieto, sin saltar, y la sensación es que el arquero lo golpeó a él.
Ya el lunes, Daniel Rodríguez se hizo cargo del silbato para dirigir el partido. Un pelotazo profundo para Gonzalo Carneiro quedó largo, Sergio Rochet llegó antes y el delantero negriazul, en un esfuerzo por alcanzar la pelota, se deslizó por el piso y terminó chocando con su pie izquierdo al arquero tricolor a la altura de la rodilla. Carneiro ya tenía amarilla (la había visto en forma correcta el domingo por una entrada dura sobre Christian Almeida) y por eso jugadores, cuerpo técnico e hinchas de Nacional pidieron la segunda amonestación, que hubiera significado la roja. Se puede considerar su esfuerzo como una "acción temeraria", por lo cual le cabía la amarilla. Tanto fue así, que Jorge Bava lo suplantó en el entretiempo.
Esta es la jugada menos polémica y más escandalosa en cuanto a su definición. Nacional recuperó una pelota en la mitad del terreno, el Pumita Rodríguez inició un desborde por la derecha, mandó un centro rastrero al segundo palo y por allí llegó el Colo Ramírez para anotar. Gol, pero el línea Horacio Ferreiro lo anuló por posición adelantada. A primer golpe de vista pareció que el delantero tricolor estaba habilitado y la televisión lo confirmó: 0,6 metros por detrás del último defensor estaba Ramírez. El gol no valió y el 0-0 final hace que el fallo del línea haya sido factor de incidencia directa en el resultado y en que Nacional haya perdido dos puntos.