TRICOLORES
El entrenador argentino que fue presentado como técnico de los tricolores hizo hincapié en tener fe para mejorar las actuaciones en la Copa Libertadores.
Ricardo Zielinski fue presentado ayer como entrenador de Nacional en el Gran Parque Central. Firmó simbólicamente el contrato, le regalaron la casaca tricolor y se mostró feliz de estar en el club albo, en algo que consideró como un “desafío”.
“Este próximo año no quería trabajar en Argentina, había tenido muchas posibilidades de ir al exterior y por una situación personal no había podido, iba a ir a Brasil, que había tenido alguna posibilidad, justo José (Fuentes) apareció en el camino y me ofreció un club muy lindo, Nacional. Averiguamos, nos hablaron muy bien del proyecto, me encanta Montevideo, así que le dimos para adelante y acá estamos”, explicó el Ruso.
“El desafío de nosotros es muy importante debido a que el club ha salido campeón. Estamos al tanto del buen trabajo que hizo Repetto. Nuestra idea es potenciar, cada vez que vamos a un club queremos mejorar lo anterior. Es difícil porque a nivel nacional, prácticamente Nacional ha ganado casi todo y a nivel internacional me parece que nosotros podemos encontrar mucha mejoría. Ojalá que podamos conformar el plantel y ser competitivo, a nivel local como ha sido durante años, y a nivel internacional estar a la altura de la institución. Mi idea con el plantel es trabajar con la base de Repetto, siempre trato de no inventar nada, sino de venir y mejorar lo que le parece a uno que puede mejorar y proseguir con las virtudes que ha tenido el equipo”, agregó Zielinski.
Desde su elección, mucho se ha hablado en Uruguay sobre que el perfil de entrenador del argentino de 63 años no va de la mano con la tradición futbolística de Nacional. Incluso hubo protagonistas directos del fútbol, como técnicos y exjugadores, que hablaron sobre el tema. El Ruso señaló al respecto que “hemos variado permanentemente, nos gusta ganar sobre todas las cosas, como le pasa a cada uno, y siempre encontramos que para ganar hay que jugar mejor que el rival, ojalá que podamos hacer el mejor juego posible y fundamentalmente tratando de tener la base del proceso anterior. No soy de los entrenadores que vienen y no aprovechan lo bueno que se hizo anteriormente. Venimos a sumar, a mejorar, a tratar de darle alguna otra idea que nosotros podamos llegar a tener y lograr los objetivos”.
Nacional cambió de técnico, pero no porque el club lo quería. Modificó al conductor del barco porque Pablo Repetto tomó una decisión de alejarse de la institución por motivos familiares. Este hecho no es nuevo para los Bolsos en los últimos años: “Es un desafío lindo porque viene de salir campeón. No nos queda otra que apuntarle a lo mismo. A nivel internacional creo que hay un piso para arrancar y mejorar muchísimo. Es difícil, y no es habitual que un club que sale campeón cambie el DT”.
Zielinski profundizó sobre su filosofía de juego. “Me adaptaré al material que tengamos y fundamentalmente al tipo de rivales. Por ahí a nivel local van a ver una versión y a nivel internacionales veremos cómo lo manejamos. En general mis equipos han sido protagonistas, en todas los lugares donde estamos siempre interpretamos las instituciones y su trayectoria”, señaló con convencimiento.
Libertadores. Desde 1997 a la fecha Nacional no ha faltado ni una sola vez al máximo certamen de fútbol a nivel continental, como lo es la Copa Libertadores. Si bien en muchas ediciones ha sido competitivo, no ha logrado definir el certamen; el tricolor llegó a las semifinales de la edición de 2009 y a los cuartos de final en 2016, cuando quedó eliminado por penales contra Boca Juniors en la Copa donde previamente había dejado por el camino al Corinthians de Tite.
Zielinski, dirigiendo a Estudiantes de La Plata -su último club-, enfrentó a Nacional en la última Libertadores y fue un rival competitivo y que estuvo a la par, más allá de que quedó eliminado en la primera fase y se tuvo que conformar con clasificar a la Sudamericana. Sobre qué le puede aportar al club para lograr ser más competitivo aún a nivel internacional, el Ruso respondió que “lo primero que tenemos es fe. Sí que vamos a hacer una buena Copa Libertadores. En la medida que los jugadores se convenzan de que realmente podemos. Por suerte en las dos últimas Copa Libertadores llegamos a los cuartos de final, con equipos que por ahí no venían en la misma situación, es decir, cuando fuimos a Estudiantes, hacía cinco o seis años no clasificaba a ninguna copa internacional, cuando fuimos a Atlético Tucumán, no había clasificado nunca. La idea nuestra es siempre tratar de proyectar lo mejor, los objetivos siempre son los más importantes, el convencimiento de todo el mundo. ‘Todo el mundo’ llamo a jugadores, cuerpo técnico, toda la gente que colabora, como para poder ir en busca de una perfomance en Copa Libertadores de acuerdo al prestigio que tiene Nacional a nivel internacional. Siempre que empiezo un proceso soy un cabeza dura y creo que me va a ir fenómeno. Ojalá lo podamos lograr”.
Mientras el presidente José Fuentes y el secretario general Pablo Durán lo escuchaban con atención a los costados, el Ruso hablaba con firmeza y respondía con amabilidad a cada una de las preguntas de los periodistas, que llenaron la sala de prensa del GPC.
“Sabemos del nivel del fútbol uruguayo, de los jugadores, vemos permanentemente jugadores importantes de Uruguay estando en las mejores ligas del mundo. Creo que hay un montón de cosas para crecer, ojalá que nosotros podamos colaborar para tratar que Nacional crezca a nivel futbolístico y trate de lograr cosas importantes, que las necesita”, concluyó.
Bilrado, Bielsa, Mourinho, Guardiola...
“Me gusta Bilardo, me gusta Bielsa, me gusta Mourinho, me gusta Guardiola y de todos uno saca cosas importantes. No soy un tipo que cree que un solo entrenador tiene todos los conceptos que uno tiene que incorporar. Trato de incorporar de todo el mundo y me adapto al plantel que tengo. En unos lugares la realidad me indica que tengo que jugar de una manera, y en otros lugares de otra forma. Trabajé mucho tiempo con Bilardo, sé de la capacidad que tiene, es un tipo que está adelantado a los tiempos del fútbol. A diferencia de los que piensan muchos, a Bilardo también le debe gustar Guardiola. Lo que sucede es que generalmente encasillamos a la gente y creo que, hoy por hoy, en el mundo actual y con la información que hay, es importante que cada uno rescate lo mejor de un montón de diferentes ideas y fundamentalmente se adapte al lugar en el que está”, aseguró Zielinski cuando fue consultado por una declaración que hizo cuando se fue de Estudiantes de La Plata.