OVACIÓN EN BRASIL

El sueño de Peñarol en la Copa Sudamericana está intacto y latente, pero sabe que no será fácil de conseguir porque el carbonero saldrá a jugar la revancha de las semifinales perdiendo 2-1 con Athletico Paranaense y visitará un estadio en el que nunca ganó ni anotó un gol.

Pero si hay algo que ha marcado gran parte de la historia del club que el martes celebró sus 130 años de vida son las hazañas deportivas.

Y esta noche Peñarol necesita una más. El equipo de Mauricio Larriera irá en busca de la épica en el Arena da Baixada, uno de los estadios más modernos de Brasil que el aurinegro visitará por tercera vez de manera oficial.

Está claro que no es un partido más. Es el más importante de los últimos tiempos y llega precedido de varios componentes emocionales que el plantel deberá saber gestionar hoy a partir de las 21:30.

Es que por un lado, el mirasol viene de hacer cinco goles en el triunfo frente a Boston River el domingo en Las Piedras. Además, el club vive una semana de festejos por su aniversario y como por si eso fuera poco, la situación de Agustín Canobbio, quien finalmente quedó habilitado por Conmebol para jugar esta noche, se suma a todo lo anterior y más allá de que es una muy buena noticia, el equipo deberá manejar bien el aspecto anímico para lograr su objetivo.

Peñarol deberá ganar y tiene que hacerlo con diferencia para avanzar. Si vence 2-0 al furacao se clasificará directamente a la final de la Copa Sudamericana. Si lo hace por 2 a 1, la serie irá a los penales, mientras que logrando una victoria por 3 a 2 sellará su pasaje al partido definitorio que se jugará el 20 de noviembre en el Estadio Centenario.

Hay ganas, hay ambición, hay convicción y también hay fútbol. Estos elementos le permiten al carbonero ilusionarse, pero también hay otros aspectos en los que el equipo debe estar muy atento si quiere llevarse la victoria.

Es que Peñarol cometió en la ida errores que le costaron muy caros y esta noche sabe que no puede repetirlos.

Y otro punto que puede marcar el transcurso del encuentro será el césped del Arena da Baixada que es sintético.

Inaugurado en 1914, el estado de Athletico Paranaense tuvo de cara al Mundial de Brasil 2014 la reforma más importante de su historia y se transformó en uno de los más modernos de todo el país.

Tiene capacidad para 43.000 espectadores y en la Copa del Mundo albergó cuatro encuentros de la primera fase del torneo. Además, es el primero de América Latina con tecnología retráctil en su techo, lo que permite no solamente partidos de fútbol sino también espectáculos musicales y otros shows.

Ubicado en el barrio Água Verde, cerca del Centro, el Arena da Baixada cuenta con todas las comodidades dentro de sus instalaciones y también fuera de ellas con servicios varios para los fanáticos.

En un estadio de primer nivel internacional Peñarol buscará la hazaña que le permita cumplir un gran objetivo: jugar la final de la Sudamericana.

El césped sintético
Tiene el certificado FIFA Pro, el más alto que se le otorga a este tipo de campos de juegos.

El techo retráctil
Es automatizado y permite que los partidos no se detengan por lluvia, vientos o tormentas.

Será sin hinchas
Debido a la pandemia, el encuentro de esta noche será a puertas cerradas en Curitiba.

Peñarol visitará esta noche a Athletico Paranaense en el Estadio Arena da Baixada de Curitiba desde la hora 21:30 en el encuentro de vuelta de las semifinales de la Copa Sudamericana.

Tras perder en la ida en el Estadio Campeón del Siglo, el carbonero va en busca de un épico triunfo que le permita avanzar a la final del torneo, porque de lo contrario se despedirá del certamen.

El equipo de Mauricio Larriera sabe que necesita ganar y por diferencia de dos goles para avanzar, y para eso deberá romper una racha porque el aurinegro nunca venció en Curitiba. Perdió 2-0 el 26 de julio de 2018 por Sudamericana y 1-0 el 3 de marzo de 2020 por Libertadores.