TORNEO CLAUSURA
Peñarol llega al partido de la novena fecha del certamen exhibiendo mejor juego; Nacional lo hace con un equipo que tiene más rebeldía.
Nacional carga con todo el peso de la responsabilidad de llevarse la victoria en la contienda clásica. Se lo demanda la tabla de posiciones. Peñarol carga con la gran responsabilidad de llevarse el triunfo para empezar a terminar con la amenaza del tricampeonato de su eterno rival. Por donde lo miren, este clásico tiene buena pinta para ser un gran duelo de la temporada.
El gran tema es de qué manera uno y otro pueden llegar a dar el paso hacia adelante y no regalar la oportunidad que se les presenta este domingo de fútbol en el Campeón del Siglo.
Diferencias entre uno y otro existen. Son muy claras. En algunos casos marcadas por ausencias determinantes y en otras por las referencias que aparecieron en este recorrido de las primeras ocho fechas del Torneo Clausura.
Para empezar, queda claro que Peñarol, gracias a que su entrenador Mauricio Larriera acumula 52 partidos con sus futbolistas, tiene una identidad de juego más asentada y clara.
Martín Ligüera tiene nada más que estos ocho cotejos y a ellos se le podrían sumar los cuatro en los que orientó al equipo como entrenador interino.
Esa labor más extensa entrega un peso mayor para que el fútbol de uno y otro tenga más y mejores asociaciones. No quedan dudas que Peñarol elabora mejor el fútbol que Nacional y que ofrece una dinámica de juego más veloz y punzante.
Lo que sí pudo conseguir Ligüera es que sus futbolistas ofrezcan una cuota de rebeldía muy grande, capaz de entregarle resultados positivos en instantes finales de las contiendas y en cotejos en los que supieron pasarla bastante mal.
Este aspecto no apareció en filas aurinegras de la misma forma que en la de los tricolores, el menos en ocasiones donde el rival supo desenchufarle su explosión y dinamismo.
Otro elemento que caracteriza muy bien a este Nacional son los números clásicos de sus futbolistas. La inmensa mayoría celebró más de lo que lamentó, mientras que por el lado de Peñarol hasta sorprende que jugadores referentes no hayan festejado tanto.
Para el aurinegro quizás no sea importante fijar el ojo en los antecedentes de todos los jugadores y sí en los que se encargan de custodiar el arco. No es menor que Kevin Dawson ya haya demostrado estar preparado para jugar este tipo de partidos y que en Nacional se produzca el debut de Martín Rodríguez porque no puede contar con Sergio Rochet.
Como tampoco está mal, para el equipo de Larriera, que su goleador terminara la pelea con el arco y que para el goleador de Ligüera se acumulen jornadas de pólvora mojada.
Claro, el tricolor puede confiar que Gonzalo Bergessio vuelva a convertirle a Peñarol, mientras que el aurinegro necesita que Agustín Álvarez Martínez abra su cuenta goleadora ante Nacional.
Las diferencias están claras. Lo único que resta es ver cuál de los dos es capaz de imponer sus virtudes.
1) En el arco
Peñarol tendrá a Kevin Dawson, su arquero titular, y Nacional jugará sin Sergio Rochet, el mejor guardameta del fútbol uruguayo. Dawson tiene 17 clásicos disputados, vivió las buenas y las mala, y Martín Rodríguez vivirá su debut.
2) En el empuje
Nacional entregó mejores señales a la hora de tener que sobreponerse a circunstancias adversas. Sumando puntos en instantes finales dejó en evidencia que es capaz de empujar con fuerza. A Peñarol en algún partido le faltó ese valor agregado.
3) En el fútbol dinámico y veloz
Peñarol tiene bien ensamblado su libreto futbolístico y es notorio que en los instantes que aflora la precisión en velocidad de sus jugadores se impone un ritmo de juego que termina consiguiendo el objetivo. En el mediocampo y en ataque el aurinegro tiene más vértigo. A Nacional ese cambio de velocidad con pelota dominada solamente la pueden aportar muy pocos jugadores y uno de ellos, quizás el que podría ser más peligroso no juega: Santiago Ramírez. La circulación del balón que realiza el aurinegro con las triangulaciones por las bandas hace la diferencia.
4) El peso de los clásicos
Los jugadores de Nacional tienen mejores números que los de Peñarol en materia de enfrentamientos clásicos y en algunos casos con valores realmente muy significativos, como es el caso de Felipe Carballo. En los aurinegros hay algunos jugadores de peso en el equipo que no acumulan resultados positivos, por ejemplo Jesús Trindade. Aunque cada partido es una nueva historia, siempre es mejor llegar con espalda ancha.
5) En la batalla de los 9
El “Canario” Agustín Álvarez Martínez pudo romper su sequía de goles, mientras que “Lavandina” Gonzalo Bergessio está peleadísimo con el gol. El 9 de Peñarol todavía no la mandó a guardar contra el tricolor y el 9 de Nacional le hizo tres tantos al carbonero, pero nada más que dos de ellos en partidos oficiales. Ambos están en la lucha por ser el goleador del año: Bergessio tiene 14 y Álvarez Martínez 12.