CLÁSICO
Entre Luis Suárez, Emmanuel Gigliotti y Juan Ignacio Ramírez llevan cinco goles mientras que Lucas Viatri, Ruben Bentancourt y Hernán Rivero no han podido convertir.
Cinco goles contra ninguno. 505 minutos jugados contra 749. Las delanteras de Nacionaly Peñarolse encuentran en veredas opuestas. Una pasa por su mejor momento deportivo desde que comenzó el año y le responde con goles a las posibles dudas que se le presenten a su entrenador, Pablo Repetto. La otra no ha logrado saldar en el Clausura un déficit que el equipo arrastraba desde el comienzo de la temporada y deja en evidencia la falta de garantías con las que cuenta Leonardo Ramos en el ataque.
De un lado, reina la tranquilidad producto de la contundencia. Del otro, la irregularidad y, en consecuencia, la incertidumbre.
Mientras que Repetto encuentra en Luis Suárez la capacidad justa para asistir y resguarda en el banco de suplentes los pases directos a la red de Juan Ignacio Ramírez y Emmanuel Gigliotti, Ramos lidia con la emergencia de resolver cuanto antes una de las cuentas pendientes que tiene Peñarol desde la salida de Agustín Álvarez Martínez: encontrar a su 9 de área definitivo.
En el estreno del Clausura, el director técnico Mauricio Larriera había apostado por la dupla Hernán Rivero-Ruben Bentancourt, que si bien tuvo sus chances, no se mostró fina de cara al arco. En el segundo encuentro, Ramos varió y pasó a probar suerte con Rivero y Lucas Viatri, pero la fórmula tampoco rindió al nivel esperado. Ya no la volvió a repetir y en los dos compromisos siguientes cambió.
Dado el rendimiento individual y colectivo, Nacional llega, en lo previo al clásico del domingo, con una cuota goleadora que se reparte entre sus delanteros titulares y los que van al banco de suplentes.
Del otro lado, Leonardo Ramos no cuenta con las mismas respuestas y sabe que no corre con la suerte de tener a un jugador de la clase de Luis Suárez.
El salteño, con dos goles en cuatro partidos, Ramírez, con la misma cantidad en tres, y Gigliotti, con uno en dos encuentros, han sido piezas clave en el funcionamiento ofensivo de Nacional, aportando el 50% de los goles del equipo en el Clausura. Los tricolores disponen, además, de Franco Fagúndez, que si bien juega por detrás del 9, es el goleador del plantel en el Uruguayo, con ocho anotaciones, al igual que Gigliotti.
Del tridente de centrodelanteros, el argentino es el que menos ha jugado en el inicio del segundo semestre. Sin embargo, es hasta el momento quien registra el mejor promedio goleador, con un gol cada 92 minutos. Ramírez, con tres oportunidades en cancha, es el que más rápido convierte -lo hace cada 66’- pese a que dos de las tres oportunidades que tuvo fueron desde el banco. Y Suárez, que es el que más ha jugado, es el que más tiempo tarda -convierte cada 141’- pero, de a poco, ha comenzado a levantar el nivel y a deleitar con asistencias.
Nacional tiene una ventaja extra respecto a Peñarol y es que cada uno de ellos ha sabido capitalizar con goles su ingreso en el segundo tiempo. El Colo Ramírez lo hizo en la primera fecha cuando se enfrentó a Deportivo Maldonado, Suárez en la segunda ante Rentistas y Gigliotti en la pasada ante Montevideo City Torque.
A Peñarol, en cambio, no le ha rendido como pretendía la incorporación de Hernán Rivero a mediados de julio y esa sequía goleadora se ha trasladado al resto de la delantera. Ninguno de los atacantes de área se ha estrenado en la red durante las cinco primeras fechas del Clausura y Bentancourt, que había logrado cuatro tantos a esta altura del Intermedio -certamen del que salió goleador- tampoco logró sostener el nivel.
Otro de los bajos rendimientos ha sido el del argentino Lucas Viatri que, aunque no se ha caracterizado por tener un alto promedio de gol en sus años previos en el club (convertía cada 287’), esta temporada en particular está muy por debajo de sus cifras habituales: lleva apenas un gol en 24 enfrentamientos y anota una vez cada 970’.
El debe clásico
El clásico será un capítulo aparte. Y para Nacional es una cuenta pendiente -que se acentúa aún más por las circunstancias actuales propias, pero también ajenas- desde hace más de un año. Los tricolores no consiguen ganarle a Peñarol desde el 22 de julio de 2021, cuando se impusieron 1-0 en el Estadio Campeón del Siglo por la vuelta de los cuartos de final de la Copa Sudamericana. Esa fue, a su vez, la última ocasión en la que le convirtieron porque después, en los tres clásicos siguientes, Kevin Dawson terminó con la valla en cero.
Peñarol, por su parte, tiene pendiente que sus delanteros se vuelvan a amigar con el gol. No solo por el bien de la institución en la tabla de posiciones, sino también para encontrar una llave adicional que, en este caso, aparece como uno de los puntos fuertes de su adversario.
En estos momentos, el Mirasol se encuentra fuera de la zona de clasificación a la Copa Libertadores del año próximo, tras la victoria de ayer de River Plate ante Cerro Largo en Melo (por diferencia de goles), por lo que el resultado del domingo en el Gran Parque Central le será decisivo para escalar posiciones.
Entre Rivero, Bentancourt y Viatri acumulan, con distintas camisetas, 23 partidos contra Nacional, en los que consiguieron nueve victorias, ocho derrotas y seis empates.
Suárez, Ramírez y Gigliotti, en tanto, suman 15 duelos: triunfaron tres veces, empataron cuatro y perdieron ocho.
Números en el Torneo Clausura
Luis Suárez es el delantero con más presencias en el ataque de Nacional desde su llegada al club. Lleva dos goles y una asistencia en cuatro compromisos. Viene de convertir ante Montevideo City Torque y está invicto en clásicos.
El Pistolero registra un total de 189 minutos jugados frente a Peñarol y un gol clásico. Está invicto, con dos victorias y un empate en esos compromisos.
Juan Ignacio Ramírez, con más ingresos en el segundo tiempo que en la oncena titular, se ha dado maña para anotar en dos de sus últimos tres encuentros con la camiseta tricolor. Su promedio de gol en el Clausura es de un gol cada 66 minutos.
Emmanuel Gigliotti era el 9 titular del club hasta que se concretó el regreso de Suárez. Sin embargo, también es una garantía cuando ingresa desde el banco. Respondió con un gol en su último partido ante Torque en el Centenario.
Lucas Viatri pasa por un bajo rendimiento futbolístico en comparación a lo que había mostrado en su primera etapa en Peñarol. En la temporada tiene un gol y una asistencia y en el Clausura todavía no ha podido hacer goles.
Ruben Bentancourt no es el mismo que se destapó en el cierre del Torneo Intermedio. Sus últimas actuaciones han sido irregulares y si bien tuvo varias ocasiones para hacer su estreno goleador, las ha desperdiciado.
Hernán Rivero necesitará un tiempo para adaptarse a la magnitud de Peñarol. Leonardo Ramos decidió dejarlo como suplente en el último partido contra Danubio y todavía, a pesar de tener 168 minutos en cancha, no convirtió.
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