TORNEO CLAUSURA
El violeta se lo dio vuelta al carbonero y logró su tercera victoria en la temporada ante un equipo que volvió a dejar puntos importantes por el camino.
De no creer. Partido bastante controlado. Ventaja 1-0 y con espacios como para poder lastimar y liquidarlo de contragolpe. Peñarol se encaminaba a su primera victoria en el 2020, pero Defensor Sporting le arruinó la noche en el Estadio Campeón del Siglo. Dio vuelta el marcador, triunfó 2-1 y con ello ganó los tres partidos que jugaron en la temporada por el mismo tanteador.
Luego de que Thiago Cardozo salvara el arco aurinegro en dos oportunidades, la idea y el estilo de Mauricio Larriera aparecieron en la cancha para que el carbonero se pusiera en ventaja.
Una jugada que tuvo 15 toques antes de la notable definición de Facundo Torres puso a Peñarol arriba y parecía que el aurinegro se afianzaba en la cancha para consolidar una victoria importante. Pero todo se derrumbó.
El violeta creció con los cambios, sobre todo con los ingresos de Franco Zuculini y Christian Chávez. Los argentinos le cambiaron la cara al equipo y de ahí en más Ignacio Laquintana tuvo más y mejor compañía en una ofensiva en la que en base a una gran velocidad, el sanducero se volvió imparable.
Valentín Rodríguez lo marcó bien a Laquintana a los 68’, pero un manotazo en la cara del atacante violeta fue sancionado con penal por Christian Ferreyra y Mathías Cardacio cambió remate por gol para poner el 1-1.
Lejos de achicarse y conformarse con el empate, los del Parque Rodó fueron por más. Y lo iban a terminar consiguiendo porque Peñarol no ofreció respuestas ni alternativas. Las variantes del DT con los ingresos de Sergio Núñez, Máximo Alonso (en su debut), Cristian Rodríguez y Luis Acevedo no incidieron en absoluto. Facundo Torres seguía siendo el mejor del conjunto carbonero, pero con escasa compañía en la ofensiva.
Lo pagó caro Peñarol porque con pelotas largas pero precisas, Defensor Sporting avisaba. Y tanto avisó que a los 84’, un largo pase tras recuperar la pelota encontró a Christian Chávez picando en su campo para correr solo con pelota dominada hacia el área y definir notable ante Thiago Cardozo para dar vuelta el marcador y poner el 2-1.
Baldazo de agua helada en Peñarol. El equipo, que mostró pasajes de buen fútbol tratando de sacar adelante un duro partido y con el sello del entrenador, pecó de errores groseros en la última zona.
El aurinegro volvió a perder con Defensor Sporting y dejó escapar una inmejorable chance de meterse en la pelea por el Torneo Clausura y, sobre todo, en la Tabla Anual, donde quedó a ocho puntos.
Peñarol murió de ojos abiertos ante un rival que no perdonó. Mauricio Larriera tendrá trabajo porque ahora sí, ya no hay margen de error.