La Nación/GDA
Dirigir a figuras de la talla de Fabinho, N’Golo Kanté y Karim Benzema debe haber sido una de las grandes motivaciones que llevaron a Marcelo Gallardo a desembarcar, contra todo pronóstico, en Al-Ittihad de Arabia Saudita en lugar de dar su primer paso en Europa. Pero apenas un mes después de rubricar aquel sorprendente acuerdo, el Muñeco no pudo haber tenido un comienzo menos auspicioso para su primera experiencia fuera de Sudamérica, que quedó retratada en la dura goleada que sufrió el martes a manos de Al-Nassr, comandado por Cristiano Ronaldo (convirtió un doblete), por 5-2 en un partido por la Liga saudita.
La caída se ubica en un contexto que no se condice en absoluto con la inversión que llevó adelante el equipo de Jeddah para atraer a algunas de las mayores figuras del fútbol europeo en los últimos tiempos: perdió cuatro de sus últimos cinco encuentros. En aquella seguidilla, tres de esos resultados llegaron en la Liga Pro saudí, en la que el conjunto amarillo y negro marcha en la sexta posición, a 22 puntos del puntero Al-Hilal, dirigido por su exnémesis de Flamengo, Jorge Jesús. Su único resultado positivo fue ante Auckland City, en su debut en el Mundial de Clubes, pero su campaña allí terminó en el siguiente encuentro, tras caer por 3-1 frente al egipcio Al Ahly, el campeón africano.
LA DERROTA, EL DESGASTE, LAS LESIONES Y EL FIN DE AÑO: Marcelo Gallardo analizó el 2-5 de Al Ittihad contra Al Nassr y el presente de su equipo. pic.twitter.com/zAA1tC2XQ5
— SportsCenter (@SC_ESPN) December 26, 2023
Fue en esa competencia también donde se comenzó a profundizar una preocupante crisis de lesionados que sigue teniendo un impacto brutal en el equipo: Muhannad Al-Shanqeeti, el lateral derecho del equipo, pisó algunas de las botellas de agua que estaban tiradas cerca de la línea lateral, se patinó y se terminó desgarrando. También fueron bajas el lateral Ahmed Bamsaud y los centrales Aseel Abed, Luiz Felipe, Omar Hawsawi, Suwailem Al-Manhali (todos lesionados) y Ahmed Hegazy (problemas con el registro para esta temporada), mientras que Madallah Alolayan debía cumplir una sanción por roja directa. El resultado fue que Gallardo debió improvisar con una defensa compuesta por Marwan Al-Sahafi -nominalmente un mediapunta- en el lateral derecho, y con Fabinho, usual volante de contención, en el centro de la defensa. En el banco de suplentes tenía apenas seis relevos disponibles.
Estas circunstancias le están pasando mucha factura al DT en lo mental, algo que él mismo confesó en la conferencia de prensa posterior al encuentro ante Al-Nassr: “Lamentablemente estamos sufriendo demasiado. Lo mejor que esperamos es llegar al final del año y poder renovar las energías. Hay que tratar de reponerse rápidamente y salir de esas circunstancias. ¿Cómo se hace? Renovándonos con trabajo, con energía, tratando de que eso pueda parar en algún momento”.
“Lamentablemente son episodios que se vienen sucediendo partido tras partido. Ya de por sí, tener tantos jugadores lesionados, todo lo que sufrió este plantel en lo que va del semestre hace que sea pesado, que llegar a fin de año sea necesario”, añadió el exDT de Nacional y River Plate.
Por si todas las bajas que está transitando no fueran suficiente castigo, Fabinho fue expulsado por una segunda amarilla debido a un manotazo que resultó en un penal, por lo que el Muñeco deberá hacer aún más experimentos para afrontar el último partido del año, este domingo contra Al Ta’ee, que pelea por la permanencia. El DT reconoció que, a pesar de que le gustó lo que vio hasta ese momento, el partido cambió demasiado luego de esa situación: “Estábamos bien, siendo prolijos, aplicados. Lamentablemente las posibilidades a favor nuestro duraron muy poco, y después cuando estábamos mejor en la segunda mitad, logramos empatar el partido y estábamos en un muy buen momento nuestro, viene el penal y la expulsión, y la dificultad de volver a meterse en el partido. Ya nos pasó hace tres días”, recordó.
Por último, Gallardo defendió también la actitud de su equipo luego del 3-2 de Cristiano Ronaldo, en donde eligió mantener alta la línea defensiva del equipo y resultó en otros dos goles de Sadio Mané sobre el final del encuentro: “A veces hace falta tener que arriesgar. Vas perdiendo con un hombre menos, contra un equipo que es habilidoso. Sabía que podía llegar a pasar lo que pasó, pero son los riesgos que corremos”.