Redacción El País
Las repercusiones por lo sucedido en el partido clásico entre Nacional y Peñaroly el malestar manifestado por dirigentes aurinegros sigue dando de qué hablar esta semana, un día después de que el Consejo Directivo del club Mirasol asistiera a una reunión con el Colegio de Árbitros.
Los reclamos están basados en la no suspensión del encuentro a raíz de los incidentes generados por parte de la hinchada tricolor y también hay serios reparos acerca de la publicación de los audios del VAR, que de momento no se han hecho públicos.
Este martes se expresó públicamente sobre lo sucedido Evaristo González, quien condenó enfáticamente la decisión arbitral de continuar con el desarrollo del juego luego de que la parcialidad tricolor lanzara a la cancha dos bombas de estruendo, aunque fue algo más cauto y se desligó del "operativo rescate" a Nacional que denunció el presidente Ignacio Ruglio.
"Si nosotros empezamos a enumerar lo que está en el artículo 14 del Código Disciplinario vemos que se rompieron todos los que mencionan. El lanzamiento de piedras a la cancha, el aviso por altoparlantes de que a la próxima piedra se suspendía el partido, el mate de metal tirado contra (Washington) Aguerre... tenemos que agradecer el hecho de que no hayan tenido la puntería de partirle el cráneo", comenzó diciendo.
"Mucho menos entendible es cómo con la segunda bengala no se suspende. (...) ¿Dónde está la jerarquía y la responsabilidad de un árbitro con respecto a esto?", se preguntó.
En diálogo con #Minuto1 de Carve Deportiva, el dirigente llamó a reunirse con el presidente la Asociación Uruguaya de Fútbol, Ignacio Alonso, para profundizar sobre estas cuestiones y lamentó la nula representación de Peñarol en el Ejecutivo.
A su vez, aclaró la diferencia entre su posición y la de Ruglio. "No estoy alineado (con lo de "operación rescate") ni estoy alineado con decir '¿para qué voy a ir una reunión si no sirve para nada?', por más de que salimos con cierta frustración".
En relación a la justificación de los jueces, dio detalles de los reclamos que elevó durante el intercambio: "¿Vamos a tener que contratar al Ministerio del Interior para que haga de referí?". "¿Cómo quieren justificarme este tema?".
Durante sus declaraciones, el dirigente también buscó dejar en claro que solo le preocupaba "lo que involucra directamente a Peñarol" y las posibles consecuencias a futuro. "Si no se puede controlar un estadio solo con hinchas locatarios, el estadio no debería estar habilitado. Tendría que estar clausurado y sin eventos, porque no lo pueden controlar".
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