ESPAÑA
Es el primer uruguayo que defendiendo al conjunto merengue le convierte un gol a Barcelona y deja de ser el futuro para convertirse en presente.
Nunca hay que guardarse nada. Cuando uno va detrás de una meta importante siempre hay que dejarlo todo y Federico Valverde lo tomó literal. Cuando a los 68’ se lo vio salir por la línea de fondo luego de pedir el cambio, a casi todos los uruguayos le recorrió un frío por la espalda. ¿Qué le pasó al Pajarito? ¿La Celeste no lo perderá para los partidos por Eliminatorias ante Brasil y Colombia? Sin embargo, daba la sensación de que estaba mareado y efectivamente era así. Lo había dejado todo, hasta la última gota de oxígeno.
Fede había abierto el marcador en el triunfo 3-1 de Real Madrid en casa de un devaluado Barcelona por LaLiga y había hecho historia al convertirse en el primer uruguayo en marcar en el superclásico de España defendiendo a Real Madrid. Su definición había sido memorable.
Iban solo cinco minutos cuando picó al vacío, le marcó el pase a Karim Benzema, recibió y de derecha cruzó el disparo a media altura para hacerse un lugar en la historia del Madrid y también del fútbol uruguayo.
Luego corrió, marcó, asistió, distribuyó muy bien la pelota, la cuidó (acertó el 83% de los pases) y fue la salida prolija que precisaba su equipo. Hasta que literalmente se agotó; o se vació, como dicen los españoles. Luego del partido el técnico Zinedine Zidane confirmó que a Fede le bajó el nivel de azúcar y se mareó, “algo lógico cuando se corre tanto como lo hizo él”, reflexionó.
Valverde fue el mejor futbolista del campo, elegido no solo por la transmisión oficial del partido, sino tambén por los aficionados en sus votaciones. “Llegó a la perfección en el gol, con mucha velocidad y una gran definición. Se vio con buenas piernas y se le notó con ganas y jugando vertical siempre que pudo. Cansadísimo, necesitó asistencia por un mareo y le sustituyó Modric”, comentó Marca sobre el mediocampista celeste.
Pajarito, de solo 22 años, se sigue consolidando en Real Madrid. Ya no solo juega y hace jugar, sino que anota goles importantes. Más que el futuro del equipo, Valverde ya es el presente, tanto como el de la selección uruguaya.
Respondió en un día clave
La figura de Federico Valverde salió reforzada del gran clásico en el que el Real Madrid levantó vuelo. Su patrón de futbolista responde a los nuevos tiempos que mandan en el fútbol. Puro físico con amplio recorrido; con fuerza para ser el hombre del centro del campo que salta a la presión arriba con Karim Benzema, aportar robo de balón ocupando mucho campo y llegada por sorpresa desde segunda línea. Así aprovechó el espacio que generó Marco Asensio con su arrastre de rivales y el pase de Benzema, antes de ponerle pausa a una definición perfecta en carrera a los 5 minutos de partido.
En un día clave, porque se hablaba de la posibilidad de que fuera el último partido de Zinedine Zidane en caso de una derrota dura, Fede lo dio todo hasta que no pudo más y se marchó con mareos del terreno de juego, cuando dejó su sitio a los 69 minutos a Luka Modric.
Números del "Pajarito"
Valverde es el noveno uruguayo que defiende el Real Madrid, el quinto que disputa un clásico y pasa a la historia por ser el primero que marca ante Barcelona. José Emilio Santamaría, una gloria madridista, llegó a jugar 23 enfrentamientos ante el eterno rival, aunque nunca logró marcarle.
“Pajarito” (de solo 22 años pero un viejo conocido de Zidane porque cuando llegó al club en 2016 lo hizo para ponerse a las órdenes de Zizou en el Castilla) suma 76 partidos con la casaca de Real Madrid, cifra que lo coloca como el segundo jugador nacido en Uruguay con más partidos en el conjunto de Chamartín. Eso sí, está muy lejos de los 337 que jugó Santamaría. Pero en su quinto clásico, el tercero de titular, ya dejó huella con su gol, que fue por otra parte su cuarto tanto en Primera.
Por detrás deja a compatriotas como Pablo García, Carlos Diogo -que también marcó al Barcelona pero jugando para el Real Zaragoza- o Sergio Rodríguez -que hizo lo mismo con el Málaga y Hércules, pero de madridista jugó un clásico sin gol-, en tanto hubo otros uruguayos que llegaron a defender al Real Madrid, pero no se estrenaron en un clásico. Ellos fueron Héctor Ramos, Julio César Britos, Juan Alberto Acosta y Gary Kagelmacher, actualmente en Peñarol.