Enviado a New Jersey - Estados Unidos
Con 25 años, y más allá de que ha entregado la cinta a compañeros como José María Giménez y Luis Suárez, tanto ante Panamá como frente a Bolivia, Federico Valverde fue quien arrancó como capitán en ambos partidos de Copa América.

A pesar de su juventud, es uno de los referentes del plantel de la Celeste y además fue uno de los destacados en la victoria de Uruguay por la segunda fecha de la Copa América.

Además de su buen partido, lo sentenció con un gol sobre el final del juego que puso el 4-0 parcial, mostrando otra de sus facetas: la de llegar al área rival y no ser solo un volante que tiene la tarea de marcar.

Al término del encuentro, Valverde analizó: "Intento dar lo mejor de mi cada partido y aportar todo lo que sé, lo que aprendí del Real Madrid con distintos jugadores. Estoy en un punto en el que juego 10 o soy criticado y estoy acostumbrado a eso. Sé que tengo que mejorar muchas cosas y soy el primero en ser autocrítico, pero hoy fue un buen partido de todos".

"Estoy contento por el trabajo del equipo, el esfuerzo y sacrificio durante cada día de trabajo. Trabajamos mucho y es parte del plan que en el que intentamos llevarnos el trofeo a Uruguay", agregó el mediocampista.

Fue el jugador de Uruguay que más partidos disputó en la temporada y uno de los que futbolistas que más jugó en toda la Copa América previo al certamen, pero admitió que salir le cuesta.

"Obvio que hay que respetar los cambios del entrenador. Como jugador me gusta jugar todo y salgo un poco enojado, pero es normal, es parte de un jugador que quiere estar siempre a disposición, pero hay gente afuera que quiere entrar y quiere demostrar y demuestra el gran equipo que somos", sentenció.