Redacción El País
Se dio la lógica. Fluminense venció 2-1 a Boca Juniors y se quedó con la Copa Libertadores de América 2023. No fue sorpresa más allá de la marea de argentinos (por encima de 100.000) que llegaron a Río de Janeiro ilusionados con conseguir la séptima corona.

Boca jugó de la misma forma que lo hizo a lo largo de este 2023: proponiendo poco, casi sin patear al arco y con puntos flacos en todas las líneas. Valentín Barco, el juvenil que sorprendió en esta misma Copa por algunos lujitos que tiró contra Nacional y Palmeiras, ayer deambuló en la cancha. Pol Fernández, el capitán, estuvo lejos de cargarse el equipo al hombro. Los delanteros entraron poco en contacto con la pelota. Edinson Cavani quedó muy solo arriba y la única que tuvo resolvió muy mal entregando un pase atrás cuando tenía espacios como para acomodarse y quedar cara a cara contra el arquero. Miguel Merentiel, con el amor propio de siempre, se las rebuscó para tener su chance y casi lo gana con un remate desde afuera del área cuando el partido iba 1-1, antes del alargue.

Increíblemente Jorge Almirón lo sacó de la cancha tras esa jugada. También sacó unos minutos después a Nicolás Figal que era el alma del equipo y quien llevaba la batuta. Se retiró visiblemente molesto con el DT, gesticulando y largando algún insulto al aire.

Esta vez los penales no salvaron a Boca, un equipo que arañó la clasificación en la fase de grupos y de octavos hasta la final llegó sin ganar un partido. Empató todos los encuentros y se apoyó en Chiquito Romero, su gran figura, bajo los tres palos.

Esta vez el arquero no pudo ser el salvador porque Fluminense lo liquidó antes. Fue 2-1, pero pudo ganarlo por más. En el primer tiempo pudo irse un gol más arriba y en el alargue tuvo una chance clarísima en un mano a mano que terminó en el palo y con la pelota recorriendo toda la línea.

A los 36’ Germán Cano abrió el tanteador luego de una buena acción colectiva. Recibió un centro atrás de Keno y fusiló a Sergio Romero que nada pudo hacer. Flu fue más a lo largo de la primera parte. Manejó la pelota y tuvo las mejores chances.

En el complemento bajó en intensidad y jugó con el paso del tiempo. Boca cambió la actitud e inclinó la cancha. A los 72’ encontró el empate con un remate de afuera del área a colocar de Luis Advíncula. De ahí en más el partido pudo estar para cualquiera de los dos porque en el último cuarto de hora el encuentro se hizo de ida y vuelta; pero ninguno estuvo fino en la definición y por eso el encuentro se fue al alargue.

En la última media hora, con muchos jugadores extenuados, la diferencia volvió a estar en un Fluminense que resolvió mucho mejor en los metros finales. A los 99’, Kennedy sacó un potente remate tras un pared con Keno (dio las dos asistencias) y marcó uno de los mejores goles de la Copa Libertadores. Fue el tanto que aseguró el título y le dio la primera vuelta olímpica en el certamen al club.

Fluminense tuvo para marcar el tercero, pero se lo negó el palo. Luego se dedicó a defender con uñas y dientes el resultado ante un Boca que llenó de centros su área. El arquero Fabio se transformó en figura bajo los tres palos y el conjunto brasileño gritó campeón.

Frank Fabra fue expulsado a instancias del VAR por agredir a Nino. Los dos equipos quedaron con 10 hombres para afrontar el segundo tiempo del alargue.

De otro planeta. Pared y potente disparo de Kennedy desde afuera del área sin dejar picar la pelota para dejar sin chances a Chiquito Romero. Una verdadera joya. Lo malo para Fluminense: Kennedy se fue expulsado tras el gol por doble amarilla por subirse a la tribuna a festejar con los hinchas.

Ya sin Cavani ni Merentiel en cancha, Boca y Fluminense jugarán el alargue tras empatar 1-1 en los 90' reglamentarios.

Boca y Fluminense empataron 1-1 en los 90' y el partido irá al alargue. El equipo brasileño fue más en el primer tiempo y encontró la ventaja gracias a Germán Cano tras una buena acción colectiva. El Xeneize reaccionó en el complemento y encontró la igualdad con un golazo de Luis Advíncula desde afuera del área. En el final, el triunfo pudo estar para cualquiera. Miguel Merentiel tuvo una clarísima con un remate de larga distancia que salió pegado al palo.

Foto: Conmebol.

Era la única manera de llegar al empate: probando desde afuera del área. Luis Advíncula fue de afuera hacia adentro, se acomodó y sacó un zurdazo pegado al palo para decretar el 1-1 parcial.

En desventaja en el tanteador, Boca adelanta sus líneas y con más ganas que ideas busca inclinar la cancha. Eso sí, por momentos queda muy mal parado en defensa y lo puede pagar caro con una contra del Flu.

En marcha la segunda mitad. Gana Fluimense 1-0 sobre Boca con gol de Germán Cano.

Fluminense se fue al descanso ganando por mínima diferencia gracias al tanto de Germán Cano. Sin brillar ni pasarlo por arriba, en líneas generales el equipo brasileño fue más. Tuvo más la pelota y las mejores intenciones. Boca apostó a contragolpear, pero apenas amagó en una oportunidad con un remate de Miguel Merentiel desde afuera del área que el arquero controló sin problemas.

Foto: AFP.

En la primera que Fluminense pisó el área con claridad, fue gol. Keno se filtró, llegó hasta el fondo y mandó el centro atrás como bien lo indica el manual. Allí, de frente, apareció el argentino Germán Cano para sacar un potente remate y dejar sin opciones a Sergio Romero.

El encuentro bajó en intensidad. Fluminense carece de profundidad y Boca corta el juego cada vez que los brasileños se aproximan con peligro. Por ahora los arqueros prácticamente no tienen trabajo.

Era una buena chance para Boca Juniors. Lanzaron en profundidad a Edinson Cavani, pero el uruguayo prefirió pasar la pelota atrás cuando tenía espacios como para acomodarse y quedar cara a cara contra el arquero.

El primer cuarto de hora pasó sin emociones, apenas con un cabezazo que controló bien Chiquito Romero. Sin embargo, el dominio del juego es de Fluminense. El equipo brasileño tiene la pelota y no pierde la paciencia para intentar quebrar la última línea de Boca. El conjunto argentino espera para lastimar de contragolpe.

Boca y Fluminense ya juega por la final de la Copa Libertadores 2023. El partido se puede ver a través de ESPN, Star+, DirecTV y DGO a través de cable y aplicaciones de streaming. Vale recordar que a diferencia de las fases anteriores, en caso de haber empate en los 90 minutos, se jugará un alargue de 30’. De persistir la igualdad, irán a penales.

Foto: AFP.

Los jugadores de ambos equipos hacen el calentamiento en el césped del Maracancá. Los uruguayos Edinson Cavani y Miguel Merentiel conformarán la dupla de ataque de Boca Juniors. El resto del equipo será con: Sergio Romero, Luis Advíncula, Nicolás Figal, Nicolás Valentini, Frank Fabra, Cristian Medina, Paul Fernández, Equi Fernández, Valentín Barco.

Fluminense, por su parte, ya está confirmado con: Fábio, Samuel Xavier, Nino, Felipe Melo, Marcelo, Andrés, Martinelli, Ganso, Jhon Arias, Keno y Germán Cano.

Los planteles de Boca y Fluminense ya están en el Maracaná para la gran final que comenzará a las 17:00 horas. Las dos delegaciones llegaron al estadio escoltadas por la policía y sin inconvenientes.

Mientras tanto, muchos hinchas siguen esperando para ingresar al estadio.

Foto: AFP.

Sobre las 13:30 horas comenzaron a registrarse algunos incidentes. Primero entre hinchas que se cruzaron en la terminal de metro. Algunos usuarios registraron golpes y las corridas.

Por otra parte, en la entrada de la hinchada de Boca, se registraron incidentes con la policía por las demoras en el ingreso. Los oficiales respondieron con gases lacrimógenos para dispersar a la gente que buscaba pasar el cordón de seguridad para entrar al Maracaná.

Las autoridades estiman que hay más de 100.000 fanáticos de Boca en Río de Janeiro. Muchos de ellos, claramente, no tienen entrada. En los alrededores de Maracaná hay largas colas para ingresar al estadio.

Foto: AFP.

Puntualmente al mediodía se abrieron las puertas del Maracaná para la final única de la Copa Libertadores de América. Si bien Fluminense se sentirá como "en casa" jugando en Río de Janeiro, vale recordar que cada hinchada tendrá la mitad del estadio a disposición. Las entradas están totalmente y se espera un lleno total. De hecho, llegaron muchos argentinos sin ticket que seguirán el encuentro desde las afueras del escenario.

Desde las 17:00 horas Boca y Fluminense jugarán la final de la Copa Libertadores. La definición tendrá cara a cara al equipo de los uruguayos Edinson Cavani, Miguel Merentiel y Marcelo Saracchi ante el conjunto brasileño que contará con el plantel charrúa Leonardo Fernández. Cavani y Merentiel se espera que sean titulares.

El Xeneize ya cuenta con seis títulos de Libertadores que obtuvo en las ediciones de 1977, 1978, 2000, 2001, 2003 y 2007. Por su parte, el equipo brasileño pretende su primera corona.

“Es el partido más importante de mi vida”, reconoció Cavani ayer en conferencia de prensa, y agregó que “menos la Copa América con Uruguay”, cambiaría todos sus títulos anteriores por la Copa Libertadores que hoy está en juego. “Por el escenario en donde se juega y por el momento de mi carrera”, argumentó el 10 de Boca.

El partido podrá verse a través de ESPN, Star+, DirecTV y DGO a través de cable y aplicaciones de streaming.

Fluminense: Fabio; Samuel Xavier, Nino, Felipe Melo, Marcelo; Martinelli, André; Jhon Arias, Ganso, Keno; Germán Cano. DT: Fernando Diniz.

Boca Juniors: Sergio Romero; Luis Advíncula, Nicolás Figal, Nicolás Valentini, Frank Fabra; Cristian Medina, Paul Fernández; Equi Fernández, Valentín Barco; Miguel Merentiel y Edinson Cavani. DT: Jorge Almirón.

Árbitro: Wilmar Roldán (COL).
Asistentes: Alexander Guzmán y Dionisio Ruiz (COL). Cuarto árbitro: Andrés Rojas (COL).
VAR: Juan Lara (CHI).

Nota: A diferencia de las fases anteriores, en caso de haber empate en los 90 minutos, se jugará un alargue de 30’. De persistir la igualdad, irán a penales.