Franco Soldano: por qué vino a Defensor, las presiones y comparaciones del Mundo Boca y el elogio a Cavani

El atacante argentino, tricampeón local y doble semifinalista de Libertadores, recordó las lecciones de la mano de Tévez y el mate que regaló a De Rossi en Boca, y confesó sus objetivos con la Viola.

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Franco Soldano en el entrenamiento de Defensor, previo al inicio de la Liga AUF Uruguaya.
Franco Soldano en el entrenamiento de Defensor, previo al inicio de la Liga AUF Uruguaya.
Foto: Ignacio Sánchez.

Jugó con estrellas como Carlos Tévez y el campeón del mundo Daniele De Rossi -su compañero de concentración a quien le regaló un mate-, llegó a disputar dos semifinales de Libertadores con Boca Juniors, salió campeón en Argentina y sufrió la inevitable comparación con Martín Palermo. Hoy, ya alejado del Mundo Boca (pero no tanto, porque lo sigue) Franco Soldano (30), jugará en el fútbol uruguayo. Crecido en los campos de las formativas de Unión de Sunchales, una localidad de Santa Fe de unos 20.000 habitantes, el delantero argentino es una de las altas de Defensor Sporting que genera mayores expectativas.

Carlos Tévez y Franco Soldano en Boca Juniors.
Carlos Tévez y Franco Soldano en Boca Juniors.
Foto: @francosoldano

Su primer salto fue a Unión de Santa Fe, desde el cual fue vendido por 1,5 millones de dólares al Olympiacos de Grecia, equipo que lo cedió a Boca por dos temporadas entre agosto del 2019 y junio del 2021. También tuvo un corto paso por el Fuenlabrada de la B de España y su último equipo fue Unión La Calera de Chile, del que quedó libre tras disputar 34 de los 38 partidos de 2024, casi siempre de volante. Entre liga, copa chilena y Sudamericana, convirtió tres goles.

Su llegada a Defensor y su opinión sobre los jugadores uruguayos

“Una de las razones por las que vine fue por lo bien que me hablaron, tanto de la gente como del club”, dice Soldano a Ovación desde el hotel en el que vive en sus primeros días en Uruguay. “Estoy acomodándome de a poco, disfrutando y muy contento”, agrega.

Llegó a Uruguay hace una semana y está preparando todo para que su esposa y sus dos hijos, de dos años y dos meses, también crucen el charco. “Tengo compañeros argentinos que han jugado acá y se han ido encantados y otros se han quedado. También compartí equipo con muchos uruguayos -entre ellos Diego Zabala, con quien jugó en Unión-, y me he llevado súper bien con todos, son muy sencillos”, añade sobre quienes siempre les dieron buenas referencias.

“Defensor me sedujo por muchas cosas: me hablaron muy bien del club y a esta altura de mi carrera priorizo estar en un equipo ordenado, que sepa lo que quiere, y también el ser protagonista. Todo eso me lo daba”, explica sobre su consideración. Después de algunos días entrenando, confirma su elección: “Se ve la calidad de gente humana y un club que hace mucho hincapié en el fútbol juvenil, que es importante”, dice, y agrega un detalle no menor: “El estar cerca de Argentina también influye”.

Su salida de Unión La Calera se dio por común acuerdo. Quería estar más cerca de su casa y aunque Chile también limita con Argentina, no es lo mismo tomar un barco de dos horas y media que estar en la costa del Océano Pacífico, del otro lado de la cordillera. En Defensor se encontrará con dos compatriotas: Walter Montoya, a quien supo enfrentar, y Federico Marchesini, quien se sumó este año tras ser parte del ascenso de Colegiales, que logró volver a la Segunda División de Argentina tras 68 años.

Los argentinos le han dado resultado al Tuerto, a la vista está con el pasaje de Claudio Paul Spinelli, que días atrás cerró su pase a Independiente del Valle de Ecuador (ni que hablar de los números de Fernando Elizari en el mediocampo). Pero lo de Spinelli no es algo con lo que se compare Soldano. “Si bien seguí los últimos partidos de Defensor, no soy de ponerme a ver el pasado de los que han jugado en mi puesto. Cuando fui a Boca se había ido Benedetto y era el máximo goleador después de Palermo en el Siglo XXI, entonces ponerme a comparar esas cosas no me gustan, vengo a aportar desde mi lado”.

Martín Palermo en su visita a Uruguay. Foto: Darwin Borrelli.
Martín Palermo, ídolo de Boca Juniors.
Darwin Borrelli

La charla con Álvaro Navarro y un debe en la Libertadores

Consultado por sus primeras charlas con el DT Álvaro Navarro, dijo que “han hablado poco”, pero que sabe “lo que representa él para la institución y que son sus primeros pasos también como entrenador”, a la vez que destacó el ida y vuelta con el Chino. “Es importante que uno pueda, a través de las experiencias que ha vivido, compartir opiniones. Se me manifestó de manera muy correcta y sencilla. Eso también es bueno para poder brindar el 100%, para lo que tanto él como el equipo necesite: desde los goles, el funcionamiento, la ayuda con los más jóvenes, vengo muy bien predispuesto para todo”.

Con Boca no pudo marcar goles en Libertadores, pero podrá hacerlo en la edición 2025 con Defensor. Más allá de eso, como en toda la entrevista, le quita importancia al rédito personal. “Los sueños van más allá de unas cuestiones individuales, con Boca me hubiese gustado ganarla (la Libertadores), perdimos dos semifinales consecutivas y si la ganaba y no hacía goles, no me iba a cambiar la felicidad. Acá el proyecto y los objetivos son colectivos, ojalá que nos podamos meter en fase de grupo como primer objetivo”.

Las expectativas y exigencias del Mundo Boca , su elogio a Cavani y el crecimiento de Merentiel

“El mundo Boca es una locura hermosa”, dice Franco, que tachó uno de sus anhelos desde niño. “Soy un agradecido de poder haberlo vivido. Es cierto que es un resonador, todo se amplifica, lo bueno y lo malo. Mi paso a nivel colectivo fue muy bueno, logramos tres títulos locales (Liga Argentina, Copa Argentina y Copa de la Liga), perdimos lamentablemente las dos semifinales de Libertadores, pero fue un equipo muy competitivo en todas las instancias. Crecí mucho, no solo en lo deportivo, sino en cómo administrar muchas cosas que te van formando para luego poder transmitírselas a los más chicos”, valora el argentino, y dice en relación a las presiones: “Es uno de los clubes más grandes del mundo, entonces nada alcanza. Es una experiencia hermosa”.

"De chico fui hincha de Boca, no lo voy a venir a esconder. Pero cuando uno ingresa en el profesionalismo y es un trabajo por ahí deja de lado un poco la pasión. No lo vivo como cuando ese chico de 10 años veía los partidos, pero sí lo sigo porque tengo compañeros, amigos y gente que trabaja en el día a día del club", explica el argentino sobre su cariño al Xeneize.

Entre esas amplificaciones estuvo la comparación con el histórico Palermo, que no muy bien recibida por el jugador. “Sé que cuando sos el 9 de Boca la comparación va a estar; fue un ídolo, el máximo goleador del club, pero me pareció una falta de respeto compararme con él por lo que fue como jugador. Además son características distintas, en un fútbol moderno, donde al centrodelantero se le exigen otras cosas”.

Y hablando de este puesto, ahora el equipo de Fernando Gago tiene a Edinson Cavani, a quien Soldano dice admirar.

Edinson Cavani en el partido entre Boca Juniors y Gimnasia de La Plata por la Liga Profesional de Argentina.
Edinson Cavani en el partido entre Boca Juniors y Gimnasia de La Plata por la Liga Profesional de Argentina.
Foto: AFP

“Es difícil hablar de un jugador de su calidad. Siempre fue de los admirados por mí a nivel internacional. No tuve la posibilidad de enfrentarlo pero es claro que, a través de su trayectoria y lo que es en Boca, que un jugador de su jerarquía puede aportar mucho”, expresó sobre el salteño, a la vez que destacó la evolución de Miguel Merentiel: “Me tocó enfrentarlo cuando él estaba en Defensa y en Boca ha crecido muchísimo”.

No llegó a coincidir con Nahitan Nández, quien se fue a Italia en agosto de 2019, pero sí compartió con ídolos Xeneizes e intentó sacar el máximo provecho. “Fui como una esponja para aprender de esos profesionales que han estado en la elite del fútbol, que han jugado Mundiales, De Rossi, siendo campeón del mundo, o Tévez, siendo de los mejores a nivel mundial en los últimos 20 años”.

Entre algunas de sus anécdotas con el campeón italiano, Soldano, que concentraba con él, narró la vez que le regaló un mate. "En este momento tomaba conmigo, así que cuando se fue le obsequié un mate para que se lleve de recuerdo", revela Soldano, que no está muy seguro que De Rossi haya aprendido a hacerlo. "No creo que ahora siga tomando, acá lo habíamos 'sudamericanizado' un poco. Daniel es un grande, un fenómeno, sobre todo como persona, como jugador ya ni siquiera voy a opinar. Tengo la suerte de seguir en contacto con él hoy en día así que estoy muy agradecido con él".

Daniele De Rossi campeón mundial con Italia en Alemania 2006

Llegó al Tuerto: "Ojala que con muchos goles"

Soldano llega a Defensor para aportar todo ese conocimiento y está al tanto del fútbol uruguayo, al que define como muy parejo. Si bien es delantero, Soldano viene de jugar de volante en Chile, así como también sucedió en Boca. “No pasa por una cuestión de comodidad personal” —comienza a responder a la pregunta de dónde prefiere posicionarse— pasa por una cuestión de comodidad y darle lo mejor al equipo. El año pasado jugué casi todo el campeonato de volante en Chile y no jugué prácticamente de delantero, así que lo puedo hacer en las dos posiciones sin ningún tipo de problema. Obviamente que mis características son más ofensivas que defensivas, pero me puedo adaptar al juego y a lo que el momento del partido necesita, así que en ese sentido no tengo problema".

“Vamos a aprovechar las oportunidades, ser un equipo competitivo dando batalla a los dos grandes y sobre todo ser regular, que te da una posibilidad de aspirar a grandes cosas. A nivel individual intentaré aportar el máximo desde donde me toque. Ojalá que con muchos goles”.

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