Enviados a Río de Janeiro, Brasil
Los hinchas de Peñarol viven horas de mucha alegría y sobre todo, expectativas de cara al partido de este miércoles frente a Botafogo desde la hora 21:30 en el Estadio Nilton Santos en el encuentro de ida de las semifinales de la Copa Libertadores.

Ya desde el lunes, día en el que llegó el plantel y tuvo un espectacular recibimiento, los fanáticos carboneros vienen montando una verdadera fiesta en cada ocasión en la que pueden tener contacto con el plantel.

Lo mismo ocurrió en la jornada del martes cuando los jugadores partieron al entrenamiento en el complejo deportivo del Fluminense y también cuando regresaron al hotel con otra gran arenga a puro cántico.

Pero en la noche del martes, varios boliches de la calle Olegario Maciel de Barra da Tijuca se tiñeron en dos colores: amarillo y negro.

Muchos fanáticos fueron a cenar y tomar algo y de paso, aprovecharon para cantar canciones de la hinchada de Peñarol. Ese mismo panorama se vio hasta altas horas de la madrugada en la rambla de la Avenida Lúcio Costa, frente al Windsor Barra, hotel en el que está alojada la delegación Mirasol.

En uno de los bares ubicados del lado de la playa, cientos de hinchas se congregaron y luego de la cena y alguna bebida refrescante, comenzaron a cantar en la noche previa a un partido que será clave para el Carbonero.

Y en ese grupo de hinchas se dio una particularidad: estaban los tres presidentes que viajaron con la delegación de Peñarol como Juan Pedro Damiani, Jorge Barrera y el actual, Ignacio Ruglio.

En un video que pudo captar Ovación, se lo vio a Juan Pedro Damiani saltando y cantando junto a muchos fanáticos aurinegros en otra muestra de unidad y sobre todo, alegría en lo que fue una noche previa que tuvo mucho colorido y buen clima hasta que simpatizantes de Botafogo irrumpieron para tirar fuegos artificiales alrededor de las 3:00 de la mañana.

Esa situación despertó y molestó bastante a los jugadores del plantel que en su mayoría se despertaron debido a los importantes estruendos.