EN BUDAPEST

Debutó Portugal, la selección que defiende el título en la Eurocopa, y lo hizo con goleada: 3-0 a Hungría. Debutó Portugal y las luces, como suele ocurrir, fueron todas para Cristiano Ronaldo. No fue por casualidad ni por su solo nombre, sino porque anotó dos goles y rompió récords.

Apenas se puso a rodar la pelota, el capitán luso rompió el primer récord: único futbolista en disputar cinco ediciones de la Eurucopa. A su vez, seguía engrosando su lista de partidos como jugador que más encuentros por el torneo continental jugó: 22.

Fue un partido que dio gusto ver, pero no tanto por lo que mostraron los equipos en la cancha, sino porque el estadio Ferenc Puskas (ese que el 15 de noviembre de 2019 fue inaugurado por Uruguay con triunfo 2-1 sobre Hungría), en Budapest, se convirtió en el primero en el mundo en recibir un partido de clase internacional con tribunas llenas, ya que más de 61.000 espectadores dijeron presente.

Portugal empezó como para pasarle por arriba a Hungría, pero con el paso de los minutos pasó a padecer el partido. Recibió un gol que fue bien anulado por posición adelantada en el minuto 80 y allí fue como que se despertó, para conquistar los tres tantos en los últimos seis minutos.

Raphael Guerreiro abrió el marcador a los 84' y Cristiano Ronaldo selló los tres puntos con un doblete: primero de penal (87') y luego tras eludir al arquero en el área chica (90'+2). Con esos dos tantos, CR7 llegó a 11 en la fase final de la Eurocopa y superó al mítico Michel Platini, con quien estaba igualado en 9 como máximos anotadores en el torneo. Asimismo, llegó a 42 si se incluye la fase clasificatoria.

Con ese par de goles Cristiano se acerca a otro récord: el de máximo anotador mundial con su selección. La marca la tiene el iraní Ali Daei, retirado en 2007 y hoy con 52 años, quien tiene 109 en 149 partidos con su equipo nacional.