Redacción El País
El árbitro chileno Piero Maza ya había pitado el final del primer tiempo, donde Peñarol vencía a Botafogo 1-0 gracias al golazo de Jaime Báez. Los planteles se iban al vestuario con tranquilidad, aunque hubo un grupo de futbolistas aurinegros que le fueron a protestar al juez, principalmente por la demora en reanudar el juego que tuvieron los jugadores del Fogao.

Con uno de los que había mayor molestia era con el arquero brasileño Jhon Victor, que demoró constantemente, en algo habitual en este tipo de situaciones, más cuando en la serie los norteños estaban cuatro goles arriba fruto del 5-0 de la ida en el Estadio Olimpico Nilton Santos.

El guardameta de Botafogo se iba de la cancha haciendo gestos con sus manos y su cabeza, cuando Washington Aguerre lo fue a buscar y desde atrás le dio un pisotón en el pie derecho de Jhon. No solo eso, también lo increpó tras esa agresión. Se regaló literalmente el arquero del Mirasol, más considerando que la cuarteta arbitral estaba observando la situación apenas dos metros atrás.

Maza no dudó y le sacó la roja al mismo tiempo que se generó un tumulto en la mitad de la cancha, pero la expulsión era irrevocable. Aunque es cuestionable la decisión del árbitro, no deja de ser una agresión cuando el primer tiempo ya había terminado. Los compañeros de Aguerre no podían entender la situación, mientras el técnico Diego Aguirre ya se había ido al vestuario.

Para el segundo tiempo entró Guillermo De Amores por Damián García. Aguerre dejó la cancha muy molesto y tirando una botella al suelo, seguramente dándose cuenta de su error