"Los clásicos se ganan”, reza una frase muy repetida entre los futboleros, aunque todos sabemos que la alegría va por barrios: se ganan y también se pierden. Lo que se desprende de ella, sin embargo, es la magnitud que tienen estos partidos.
Son especiales no importa la tabla ni el favorito, y lo sabe el hincha, el dirigente, el técnico y también el jugador. Y toda esa presión, para algunos es motivación. Los llaman “jugadores clásicos”.
De esos hay una larga lista histórica. Desde el Indio Olivera y Hugo De León, hasta el Tony Pacheco y el Loco Abreu, más una infinidad de nombres que dejaron su huella en más de un siglo de historia del clásico uruguayo. Y son ellos los que no pueden faltar a una cita clásica, no obstante la forma, la racha o la estrategia, porque son baluartes tanto para sus compañeros como para sus hinchas en partidos donde solo importa ganar.
Hoy de esos hay en los dos planteles, arrancando por sus capitanes. De un lado Diego Polenta, que en sus tres pasajes en Nacional disputó 16 clásicos, de los que ganó cinco, empató ocho y perdió tres; anotó dos goles -ambos de penal en el mismo partido- y recibió dos tarjetas rojas.
Del otro lado Matías Aguirregaray, que entre sus cuatro etapas en Peñarol jugó 15 clásicos: ganó cuatro, empató siete y perdió cuatro; fue expulsado una vez y convirtió cuatro goles. Entre ellos, el más significativo fue el primero: el Carbonero llegaba con ventaja a la segunda final del Uruguayo 2009/10, en la que el Vasquito llegó hasta el área como un puntero más y puso el empate que le dio a Peñarol el título después de siete años de sequía.
Un dato de color es que los cuatro goles del Vasquito Aguirregaray a Nacional fueron sobre el arco de la Tribuna Colombes, adelante de la hinchada tricolor. Mientras que del otro lado, Polenta pateó los dos penales de frente a la hinchada de Peñarol en el arco de la Tribuna Amsterdam. Asimismo, entre ellos se cruzaron cuatro veces en clásicos, todos en la temporada 2015/16: los dos oficiales fueron empates 1-1 y 2-2 -Aguirregaray marcó en los dos y Polenta en el último-, y por amistosos de verano uno fue bolso y el otro manya por penales.
Lo cierto es que los dos defensores tienen abundante experiencia en clásicos, y si bien los equipos para el sábado aún no están confirmados, se presume que ambos van a tener su lugar. A pesar de que el lateral carbonero no jugó el último partido del torneo frente a Liverpool ni el clásico del Apertura en el Campeón Del Siglo. Polenta, en tanto, seguramente ocupará mañana su sitio en la zaga tricolor.
Pero más allá de ellos dos, de uno y otro lado hay más futbolistas con rico historial clásico. Del lado de Nacional está el Chory Castro, que con 23 disputados nadie lo supera entre los dos planteles que se enfrentarán mañana, y en consecuencia es de todos el que más clásicos ganó, con 10. Y además están Diego Rodríguez y Franco Fagúndez, que aunque tienen saldo negativo contra Peñarol, estuvieron en la victoria tricolor 3-1 en el último clásico en el estadio de Nacional.
Del lado aurinegro se destaca otro marcador de punta: Lucas Hernández con seis triunfos y apenas una derrota en doce clásicos jugados. Y también Kevin Méndez y Valentín Rodríguez, dos surgidos de las formativas de Peñarol que ya saben lo que es convertir en el GPC. El primero además anotó en el CDS por el último clásico oficial. Mientras que el segundo tiene el imborrable golazo en el cruce por la Copa Sudamericana 2021, que terminó 2-1 a favor del Carbonero, y de cinco clásicos solo peridó uno, que fue la vuelta de ese mismo cruce por octavos de final y le valió la clasificación al aurinegro.
Siempre hay favoritos y rachas buenas y malas, pero al final este clásico se lo llevará el plantel que mejor gestione la presión. Que con Peñarol en la definición y Nacional lejos en las tablas, el de mañana podría el último del 2023, a la espera de lo que pase en la Copa AUF Uruguay, donde podrían verse las caras por cuartos de final.
Ganó cinco, empató ocho y perdió tres.
Penales
Uno lo hizo Aguirregaray y el otro un joven Federico Valverde. Los dos los pateó el zaguero y capitán tricolor para convertir sus únicos dos goles a Peñarol, en el empate 2-2 del Clausura ‘16.
De escritorio
A Polenta se le computaron tres goles luego de que se suspendiera el clásico por los incidetes del 2016 en la Amsterdam.
El primero
El zaguero debutó a lo grande en los clásicos. El primero fue un 9 de noviembre del 2014, el icónico partido del tiro libre de Recoba a los 95’.
Ganó cuatro, empató siete y perdió cuatro.
Final 2010
El primer gol clásico del Vasquito valió un campeonato. Anotó el empate que le dio a Peñarol el título luego de siete años.
Clausura 2013
Convirtió el tercero de penal, cuando Peñarol ganaba 2-0 con goles del Tony Pacheco y Zalayeta en el Estadio Centenario.
Apertura 2015
Fue su tercera etapa en el club de sus amores. Apareció solo en el segundo palo y puso de cabeza el empate 1-1.
Clausura 2016
Ganó de cabeza para el empate parcial, en el icónico 2-2 del nucazo de Marcel Novick que valió el título ese año.
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