Redacción El País
Cuando el uruguayo Paulo Pezzolano tomó las riendas del Valladolid de España, el equipo rozaba la zona roja de LaLiga y terminaría descendiendo de categoría al final de la temporada.

Al comienzo del ciclo 2023-24 en la Segunda División, una mala racha de partidos derivó incluso en que algunos hinchas pidieran su renuncia. Sin embargo, hoy esa realidad es muy distinta: el equipo se ubica en la segunda posición de la tabla de posiciones –zona de ascenso directo– y ganó siete de los últimos 10 juegos.

Pero más allá de los resultados, que si bien son buenos todavía queda mucha Liga por jugar, el Papa sorprendió en el Viejo Continente por su metodología de trabajo: destacar que cada uno de los integrantes de su cuerpo técnico tiene un rol específico indispensable para el equipo.

Fue eso lo que llamó la atención de Fórum Internacional de Quarentena da Bola, evento que invitó al Papa para que el uruguayo participe como expositor en su quinta edición.

Quarentena da Bola es el grupo organizador de estos foros que son de Portugal, pero de participación internacional, ya que han citado a exponentes de diferentes nacionalidades de las mejores ligas y equipos del mundo del fútbol.

Han participado, por ejemplo, Pepijn Lijnders (segundo entrenador de Jürgen Klopp en el Liverpool), José Fontes (analista de José Mourinho en la AS Roma), Kevin Braybrook (jefe de scouting del Arsenal), entre otros.

La exposición de Pezzolano fue el 23 de noviembre y lo que más sorprendió –y en lo que más se destacó– fue justamente por su metodología. En este tipo de charlas virtuales, con entre 200 y 300 oyentes en el público, y que generalmente son individuales y monótonas, el uruguayo participó junto a todo su cuerpo técnico, fue interactivo con cada uno e intentó plasmar la idea que pregona de que "en el equipo todos somos uno".