Enviado a La Paz - Bolivia
Peñarol jugó el partido que tenía que jugar frente a The Strongest en la altura de La Paz y clasificó a los cuartos de final de la Copa Conmebol Libertadores, metiéndose entre los ocho mejores de América a partir de una enorme solidez defensiva que salvaguardó la diferencia de cuatro goles que había sacado en su Estadio Campeón del Siglo.

Uno de los pilares aurinegros en la derrota con sabor a triunfo en el Estadio Hernando Siles fue el brasileño Leo Coelho, que jugó por derecha en la línea de tres que paró Diego Aguirre junto a Javier Méndez y Guzmán Rodríguez.

El norteño sacó todo lo que llegó sobre el área aurinegra por arriba y estuvo muy firme en la marca, ganando prácticamente todos sus duelos individuales. Fue el gran bastión que tuvo la defensa de Peñarol en La Paz.

Incluso la mano involuntaria dentro del área —que terminó advirtiendo el VAR para sancionar el penal que marcó la mínima diferencia a favor del local en el partido— no mancharon su partido, ni tampoco generó un declive en su rendimiento.

Luego del partido y confirmada la clasificación, Coelho acompañó a Diego Aguirre a la conferencia de prensa y fue objeto de elogios por su rendimiento en el campo de juego, lo que causó la emoción del defensor brasileño.

"Muchas gracias. La verdad que muy contento. Vengo preparándome para este día, para este partido. Hace más de un mes que todo el equipo se viene preparando y gracias a Dios se dio todo muy bien hoy y salimos clasificados, y ahora vamos por más", dijo Coelho en su primera intervención.

Seguido habló Aguirre, que también destacó su rendimiento a pesar del desafortunado penal: "Físicamente hubo una buena respuesta, yo creo que el partido fue controlado más allá de alguna situación puntual, como la jugada del penal que es una jugada desafortunada de Leo que hizo un partidazo y estoy feliz por él".

Después le consultaron al zaguero qué le generaba estar a cuartos de final con Peñarol, y respondió: "La verdad que una ilusión muy grande. Yo elegí venir a este club y estoy muy contento de ser parte de esta linda historia, de poner a Peñarol entre los ocho mejores de América y jugando, porque hoy me tocó jugar y lo hice bien, estoy acá para esto y estoy agradecido".

Finalmente, siguieron elogiándolo y no aguantó el llanto: "Terminé el partido muy emocionado porque, como Diego sabe, es una lucha de todos los días y solo. Llego entrenar temprano, hago mis cosas y me preparo para este momento. Y la verdad que poder cumplir así un partido tan importante para este club tan grande, me emociona"

"Por muchos momentos fueron muchas críticas y hoy pude estar acá haciendo buenas cosas, así que muchas gracias por todo", expresó y se secó algunas lágrimas que cayeron por su rostro.