Hay una frase que los dirigentes de Nacional han hecho énfasis en repetir una y otra vez en las últimas horas y es acerca de la cantidad de jugadores formados en el club que tenía la lista de convocados de Martín Lasarte para la final clásica del pasado domingo: 12 sobre un total de 21 citados.

El dirigente Gustavo Amoza dijo en Carve Deportiva que la directiva había sido “muy castigada” por ese asunto y Alejandro Balbi y el directivo Antonio Palma salieron a reforzar el concepto: “Cuando se escucha por ahí que no hay planes, programas o no se trabaja bien en formativas, es bueno que el hincha sepa que en una final clásica más de la mitad del plantel era nacido adentro del club”, opinó el presidente.

El dato cobra mayor entidad echándole un vistazo a lo que fue la alineación de Nacional en el último tramo del partido, con dos caras visibles que hasta el año pasado jugaban en Tercera División (Jeremía Recoba y Gonzalo Petit) y un tercer protagonista que meses atrás estaba peleando el ascenso a Primera con Rentistas.

En resumen, el equipo terminó los 90 minutos con siete (por la expulsión de Oliva) de los 11 jugadores en cancha iniciados en las juveniles tricolores. Y más rédito le da a la cifra el hecho de que el gol del empate de Petit cayó producto de una construcción 100% tricolor: corte de Christian Oliva, recepción del juvenil y devolución de Sebastián Coates; descarga para Leandro Lozano; intervención de Jeremía Recoba cayéndose y asistencia deluxe de Mauricio Pereyra.

Aunque habrá quienes halaguen la apuesta por cómo resultó, seguramente en la otra campana estarán los que denuncien la falta de recambio que tuvo Martín Lasarte, que expuso a cuatro debutantes clásicos en una misma tarde (Petit, López, Federico Santander y Alexis Castro).

Foto: Estefanía Leal.

De eso se trata el tire y afloje permanente entre estas dos corrientes, cree el coordinador de juveniles Fernando Curutchet, aunque el tema lo tiene sin mayor cuidado: “Generalmente cuando se habla de las formativas, es porque pasa algo superlativo, como esto de Petit, o porque las cosas están mal. Entre medio pasan muchas cosas”.

En diálogo con Ovación, el dirigente de juveniles dio detalles de algunos lineamientos que explican parte del crecimiento de Petit, pero también de otros chicos. “Le hemos recomendado a algunos empresarios que si tienen jugadores con edad de Primera a los que se los sube y se les hace un contrato, los mantengan viviendo en la residencia. Gonzalo lo entendió perfecto y recién hace dos semanas se fue a vivir al apartamento con el hermano, que está estudiando acá (en Montevideo). En parte lo hace también para tener mayor comodidad con el estudio”.

Foto: Ignacio Sánchez.

Para esta área, Nacional invierte unos US$ 2,2 millones por año. Además de los ejes deportivos, las formativas tienen el apoyo psicológico de Verónica Tutte, que actúa junto a otros psicólogos deportivos para atender a las diferentes categorías.

“No hay cédula en esto. Depende del jugador, la posición y los momentos coyunturales en los que aparecen. Cristiano Ronaldo tiene 39 años y sigue jugando. Luis Suárez igual. Y hay otros que debutan con 15. Es un tema de madurez en cuanto a lo emocional, lo físico, la comprensión del juego. Hay jugadores que lo logran antes y otros después. Si no le diéramos a la Tercera la importancia que tiene, hoy no tendríamos un jugador de la calidad de Lucas Sanabria”, sentenció Curutchet.