Alejandro Balbi prendió el altavoz y, como cada vez que habla, su palabra -más aún por ser el presidente de Nacional- terminó haciendo ruido.

Para un lado o para el otro, el abogado genera reacciones con sus apariciones públicas y esta última vez –que se refirió a la "obligación" de su club de "proteger" a un funcionario de Peñarol e ironizó con los "sketch" de Ignacio Ruglio– no fue la excepción.

El pasado lunes, ya le había deslizado a Ovación un adelanto del intercambio que había mantenido meses atrás con el jefe de prensa de Peñarol, Diego Pérez, algo que terminó de hacer público ayer y que despertó la reacción del trabajador al acusarlo de avalar una “campaña mediática” en su contra.

Encolumnado, le salió al cruce el presidente Ruglio, quien, entrevistado por el programa de streaming Sacá del medio, dio detalles de un reciente diálogo que tuvo ayer con Balbi. Aseguró haberle manifestado que estaba equivocado: “No se escribió un mail pergeñando que ustedes se iban a comer una multa”.

Más temprano, el representante institucional de Nacional había ironizado con los “sketch” de su par aurinegro: “Ya empezamos de vuelta con los estados de WhatsApp. ¿Te acordás de los sketchs que hacía Tinelli? Parece lo mismo”.

La relación entre ambos hoy está en su punto más flaco. Lejos parece haber quedado aquel almuerzo veraniego en febrero, donde ambos mandamás compartieron una charla informal muy amena en la parada 5 de la Playa Mansa de Punta del Este.

Foto: Ricardo Figueredo.

El propósito de aquella reunión era hablar de la actualidad de sus clubes, dejar a un lado las chicanas mediáticas y, a pesar de la diferencia palpable en los colores, ese día terminaron encontrando coincidencias en su don de dirigentes. Hoy, con un clásico a la vuelta de la esquina, las diferencias institucionales vuelven a marcar la cancha.

Balbi y Ruglio no encuentran acuerdos y su distancia es palpable. No en vano el abogado dijo al programa 100% Deporte de la Sport 890 que no veía "autenticidad" en los intercambios: "Cuesta y es difícil cuando no ves autenticidad en el relacionamiento humano. Las comparaciones son odiosas, pero con Juan Pedro Damiani, con (Jorge) Barrera y otros dirigentes de Peñarol no pasaba. Lamentablemente, con esta dirigencia de Peñarol pasa y no solo con Ruglio; con alguno más también. Entonces, es muy difícil cuando te sentás a hablar de ciertos temas".