Redacción El País
Rodrigo Muñoz, pese a tener su vida en Paraguay, sigue aferrado a sus raíces y no se desprende del nexo afectivo que lo vincula a Cerro, club que lo formó como jugador profesional.

Con el sentimiento de su abuelo (fallecido) todavía vivo, el exarquero viajó a Uruguay en los últimos días para recibir una plaqueta especial en homenaje a su trayectoria en el club. La distinción lo reconoció por parte de los hinchas bajo el siguiente sello: "La tribuna no te olvida".

Además de la lluvia de aplausos que acompañó la mención, el Popi se mostró sonriente al reencontrarse con viejos compañeros que lo apadrinaron cuando todavía era un chiquilín con hambre de gloria. Uno de ellos fue Ojota Morales, quien hoy actúa como colaborador técnico en Nacional.

La noche también estuvo acompañada de música y de un reconocimiento para el exzaguero Julio Dalmao, quien tiene una doble coincidencia con Muñoz: se destacó en Cerro y posteriormente también vistió la camiseta de los tricolores.

"Noche de reencuentro entre la familia cerrense y sus ídolos para revivir esas gestas que quedaron en la memoria de todos", destacó la mención.

Foto: Ale Moreira.

A pesar de las múltiples oportunidades ofrecidas por Cerro y una promesa hecha a su abuelo de volver algún día, la familia fue su prioridad. “No fue una decisión fácil decir que no. Pero cuando uno tiene hijos, ellos están primero”, explica. Y concluye: “El club se portó bien conmigo, pero la familia puede más”.

Hoy Muñoz está abocado a la representación de futbolistas. Por estos días, se encuentra radicado en Uruguay, aunque su presencia en el país no será permanente.