AURINEGROS
El elenco mirasol volvió a mostrar falencias en el primer certamen del año, algo que le ha ocurrido de forma más común de lo que seguramente le gustaría.
"Año nuevo, vida nueva” es un refrán que se usa popularmente, pero que a Peñarol no siempre le cae bien porque los inicios han sido un tanto complicados para el aurinegro en los últimos años.
Si se tienen en cuenta los últimos 10 torneos cortos, dejando afuera el que está disputando actualmente, tres de los cuatro con menos puntos son de Apertura.
El recambio en el plantel puede influir y el hecho de que a veces también ocurra en el cuerpo técnico puede jugar su partido, pero es un hecho que el primer certamen de la temporada suele ser complicado para Peñarol.
En relación a los 13 puntos que actualmente lleva sumados en el Apertura 2022, solo una vez en los anteriores 10 torneos estuvo por debajo de esos números y fue en el Apertura 2020 donde cosechó 12 puntos en nueve fechas producto de tres triunfos, tres empates y tres derrotas.
Precisamente esas 12 unidades son el peor arranque mirasol en los últimos 10 torneos y es seguido por los 14 puntos que sumó en el Torneo Apertura 2021. La excepción son los 16 del Clausura 2020, pero luego aparece un nuevo Apertura de flojo rendimiento en su arranque: el de 2017 con 17 unidades en las primeras nueve fechas.
No es casualidad que ninguno de estos cuatro, si se suma el del Clausura, hayan terminado con Peñarol logrando el trofeo. De hecho, si se tienen en cuenta los torneos cortos en los que Peñarol levantó el título en lo que vamos del Siglo XXI lo máximo que perdió de unidades al cierre del mismo de cada uno fue de 14 puntos (Clausura 2014/15, Apertura 15/16 y Apertura 2019), la cantidad que hoy ya dejó por el camino en solamente nueve encuentros.
Otra prueba clara de las dificultades aurinegras en el Apertura se refleja directamente a la hora de los títulos ya que desde que se juega con dos torneos, Peñarol ganó solamente cinco veces el Apertura y duplica (10) los trofeos al momento de jugar el Clausura.
Más allá de que es el final del Campeonato Uruguayo lo que importa y que más de una vez el aurinegro logró remontadas en el cierre de año, no deja de ser un déficit en el que el aurinegro deberá trabajar y mejorar.
El Apertura 2022 está lejos y aunque no es imposible, es muy complicado que lo gane, aunque deberá empezar a buscarle la vuelta para no alejarse en la tan importante Tabla Anual, esa que todos miran precisamente cuando el Uruguayo se va.