Hace muchos, muchos años, en su tercera presidencia, el entonces presidente de Nacional Eduardo Ache fijó la política institucional “Socios gratis”, con el objetivo de llegar a un total de 100.000 personas asociadas. Así, dejó de comercializar las entradas para los afiliados durante los partidos del equipo en el Gran Parque Central (o, en su defecto, el Estadio Centenario las veces en que fue locatario).
Sin saberlo, trazó un precedente que se mantuvo durante la mayor parte del mandato de José Luis Rodríguez (2016-2018) -a excepción de los partidos de Copa Libertadores y alguno importante por el Campeonato Uruguayo- y las presidencias posteriores, incluida la actual, que asumió inesperadamente el abogado Alejandro Balbi tras el fallecimiento de José Fuentes.
También lo supo implementar para las cabeceras Ricardo Alarcón, que gobernó de 2007 a 2012.
—Fue un sistema que revolucionó. La idea era darle un servicio a los socios para que más se hicieran -dijo a Ovación el exmandatario.
Los planes para esta temporada van, en parte por otro carril. Aunque en la dirigencia defienden el “espíritu general” de que todos los socios puedan ir a cualquier tribuna de forma gratuita -y así lo mantendrán-, también entienden que es importante hacer una consideración con los butaquistas.
Bajo ese parámetro, hace dos temporadas se decidió empezar a cobrar un monto en la Atilio García central, de igual forma que se hace en todas las tribunas durante los partidos de Copa Libertadores o Sudamericana.
Ahora, todos aquellos asociados (sin butaca designada) que quieran acceder a la la segunda bandeja de la José María Delgado en el Campeonato Uruguayo también deberán pagar y esa es la novedad que se conoció en las últimas horas. La primera prueba piloto se verá el próximo viernes frente a River Plate, en el estreno del equipo por el Torneo Apertura 2024.
Aunque la posibilidad de seguir asistiendo gratis a los laterales de la Atilio y al primer anillo de la Delgado continuará, ubicarse en el segundillo anillo de esta última pasará a tener un costo de $420.
Para este cambio de normativa, la dirigencia tomó como punto de partida la conducta de los socios en años anteriores. Del análisis se desprende que una cantidad importante se termina sentando al lado de aquellos que pagan un monto extra -desde $5.900 hasta $13.896, dependiendo del sector seleccionado y la modalidad de pago- para asegurarse su lugar, algo que ven como una “injusticia”. Es así que ahora el que quiera compartir tribuna lo podrá hacer, siempre y cuando pague el precio.
Entre las opciones, se había barajado la chance de que la nueva norma se aplicara para toda la tribuna Delgado, ya que en buena medida es ocupada solo por butaquistas. “En la alta, hay muchas más ventas de butacas y, por lo tanto, el impacto económico es menor”.
Finalmente se descartó, explicó una de las fuentes tricolores consultadas: “En la baja ya hay un acrílico que separa la parte central de los laterales”.
El impacto del cambio
La delimitación va a tener un “impacto favorable” desde el punto de vista económico, aseguran desde Nacional. Sucede que lo que antes computaba como canje ahora se sumará a la recaudación que deja la venta del público general y la tribuna visitante.
Con esta nueva medida, la directiva también pretende acelerar la compra de butacas, que tuvo un crecimiento exponencial entre julio y diciembre de 2022, luego de que Luis Suárez anunciara su vuelta al club.
Hubo un pico de 1.500 registros y los socios pagantes ascendieron a 71.000.
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