Luis Suárez —que hace un mes anunció su retiro definitivo de la selección uruguaya— salió al cruce de Marcelo Bielsa por la forma de relacionarse que adoptó el entrenador con los futbolistas del plantel principal y el trato que percibió hacia diferentes funcionarios del Complejo Celeste.

Entre otros puntos, el futbolista de Inter Miami —que se despidió como el máximo goleador histórico del seleccionado— reparó en la situación de Minguta (histórico equipier) que, según denunció, hoy ya no tiene contacto directo a diario con los jugadores por orden de Bielsa. "Lleva 30 años en la selección, no dice ni 'ay' y va a seguir sin decirlo porque quiere a la selección y necesita de su trabajo. Pero hoy en día tiene que ir por atrás del Complejo a comer al parrillero, no puede pasar por la cocina".

En diálogo con De fútbol se habla así (DSports), desarrolló su argumento y dio detalles de lo que había percibido en la interna: "¿Por qué jugadores de experiencia como Nacho Gónzalez, el Flaco Fernández o el Ruso Pérez, que hoy en día son entrenadores, tienen que comer en la barbacoa y no cruzarse con el plantel principal? Nosotros antes convivíamos con toda esa gente, era todo alegría y era espectacular lo que se vivía".

Y continuó marcando diferencias: "Hoy en día estás hablando con un fisio en la cocina y el fisio está mirando para atrás a ver si lo ve alguien. ¿Por qué? Es sano. Es humano eso. Es libertad de trabajo. ¿Ya hizo su función y no puede disfrutar de compartir con momentos nosotros?".

En otro tramo de la extensa entrevista, Suárez contó una situación puntual que vivió junto a sus compañeros cuando estaban de camino a New Jersey en la Copa América. Según relató, fueron advertidos por uno de los preparadores físicos para que no se detuvieran a saludar a los cientos de hinchas que estaban en las inmediaciones del hotel esperándolos. "Dice Marcelo que no paren con la gente, que sigan derecho", le habría dicho, según precisó.

Y dio más detalles señalando que él, "como capitán", desde el fondo del ómnibus que los trasladaba, se paró y le dijo "¿cómo, profe?", a lo que este le contestó: "Yo les paso lo que me dice el entrenador".

"Perfecto, pero como capitán y por respeto a la gente y al agradecimiento que nosotros tenemos desde que empecé en la selección, vamos a parar todos, muchachos", retrucó Suárez, de acuerdo a sus declaraciones: "Ahí estuvimos 15 o 20 minutos, una mitad para un lado y otra para el otro, con la gente. Al otro día tuvimos una charla en la que el entrenador empezó a hablar de que el uruguayo compite y que juega por la gente. Ahí nos miramos entre todos y dijimos: '¿Cómo por la gente, si ayer nos pediste que no bajáramos?'".

Su discurso dio cuenta de la decepción que sintió por el proceder de Ignacio Alonso, presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), y Jorge Giordano, director de selecciones, ante este caso.

Aseguró haber tenido conversado directamente del tema previamente con ambos y también manifestó: "Me duele que yo lo diga hoy en día, pero lo permitieron Nacho y Giordano. Fueron ellos que le permitieron (a Bielsa) tener ese trato con el personal y con la convivencia".

A los compañeros de Suárez se les ocurrió, a modo de homenaje, hacerle un pasillo en su última llegada al Complejo Celeste. Sobre eso, el delantero de 37 años comentó lo siguiente: "Me querían hacer un regalo y el entrenador se molestó porque le estaban trastocando la planificación, porque él tenía una charla 12:45 con otro jugador y le estaban trastocando eso por hacer un pasillo".

“Cuando me enteré de eso, imaginate... (...) Mis compañeros afrontaron esa situación y dijeron: ‘No, queremos hacerle la despedida a Luis’", manifestó.