El mantatario de Brasil, Lula da Silva, mantuvo este miércoles en la mañana en la residencia de Suárez y Reyes una extensa reunión con el presidente Luis Lacalle Pou. Al término del encuentro, ambos mandatarios brindaron una declaración conjunta en la que hicieron referencia a la modernización del Mercosur y la intención uruguaya de negociar un acuerdo de libre comercio con China, entre otros temas.
Sin embargo, la pelota también estuvo presente. Sobre el cierre de su discurso, Lula se animó a bromear sobre dos hechos deportivos que generaron la sonrisa cómplice de Lacalle Pou.
"Le dije al señor presidente que además de admirar y tener muchos amigos en el Uruguay, lo que no me olvido nunca es la Copa del Mundo de 1950 aunque ya pasó hace mucho tiempo", dijo el presidente brasileño.
En 1950, cuando Uruguay venció a Brasil 2-1 en el Maracaná y privó a Brasil de ganar su primer Mundial, Lula era un niño de cinco años. Pese a ello, hoy dejó en claro que el recuerdo de ese partido aún perdura en su memoria.
Pero hubo más. Tras ese comentario, el presidente brasileño hizo referencia a la llegada del Pistolero al fútbol de su país. "Si yo fuera presidente del Corinthians, que es mi equipo de fútbol, no hubiera dejado nunca que Luisito Suárez se fuera al Gremio. Lo hubiera llevado a Corinthians", remarcó.
Luis Suárez lleva dos partidos y cuatro goles con la camiseta de Gremio, con la que ya ganó la Recopa Gaúcha. La llegada del salteño revolucionó el fútbol de ese país. Este miércoles, a las 21.30, Lucho jugará su tercer encuentro ante Pelotas de Brasil (transmite Sportv).