Redacción El País
Marquinhos, el “veterano” de 29 años que es líder en el París Saint Germain, habló de su rol de referente en la selección brasileña y de la importancia que tiene para ellos el partido con Uruguay en la búsqueda del mejor funcionamiento posible con Fernando Diniz, a pesar de que todos saben que su conducción tiene fecha final, ya que en 2024 asumirá Carlo Ancelotti.

“Los partidos fuera de casa tienen esta prueba extra, el factor campo, los aficionados. Es natural que quieran ser protagonistas, pero hay que medir fuerzas. Tenemos nuestro estilo de juego, ellos intentarán implementar el suyo, intentarán anular nuestras fortalezas; nosotros intentaremos anular las suyas. Es una nueva generación fuerte. Será un juego de medir fuerzas, de exponer lo que piensa y ha trabajado cada equipo”, señaló con templanza en conferencia de prensa.

Y es que por un lado estará el juego paciente de Brasil, que busca hacer toques para encontrar los espacios, y por el otro el juego vertical y vertiginoso de Uruguay, que buscará minimizar las virtudes de los brasileños.

“El Centenario es parte de la historia del fútbol. Estuve aquí algunas veces con la selección, lo vemos y lo sentimos, la historia del fútbol vive aquí, sabemos la fuerza de la selección uruguaya en este campo. Somos conscientes de lo difícil que será, tenemos que hacer lo mejor que podamos, lo que sabemos hacer. El resultado es muy importante para nosotros”, puntualizó el zaguero que sobre la hora hizo el gol del triunfo contra Perú, en la última visita brasileña.

Como muchos de sus compañeros, incluyendo a Neymar, Marquinhos apoyó el actual proceso del técnico que también está en la final de la Copa Libertadores con su Fluminense: “Diniz irradia extrema confianza, independientemente de su edad, experiencia, tiempo en el equipo o selección nacional. Lo viene demostrando en la selección y esa confianza es clave para nosotros”.