ENTREVISTA

Hoy es el último día del plazo quetiene Defensor Sportingpara pagar la deuda que mantiene con los futbolistas que separó del plantel en octubre y a quienes en el mes de mayo dio la razón un tribunal de la Asociación Uruguaya de Fútbol.

Mathías Cardacio es uno de los jugadores que decidió acudir a la Justicia y que deberá percibir una compensación económica por parte de los violetas.

“Nos han hablado para hacer algún tipo de arreglo porque se quieren evitar algunas cosas, pero bueno, nosotros no vamos a ceder”, contó el futbolista a Ovación. Según indicó, aún hoy, cinco meses después de que la directiva decidiera separar a él y otros nueve compañeros de los entrenamientos, aún no saben por qué se tomó la decisión.

Cardacio y Matías Cabrera tenían contrato hasta finales de este año, por lo que Defensor Sporting deberá pagar el total del contrato además de una compensación por no permitirles entrenar durante todo este tiempo.

El futbolista entiende que la situación con el club del Parque Rodó cierra las puertas, prácticamente, para siempre: “El vínculo se rompió con los dirigentes de turno. Después, obviamente, quedaron otras rispideces. Ellos tomaron la decisión y nosotros demostramos que fue equivocada. No veo muy viable volver al club más adelante o en algún momento”, comentó.

Respecto a la reacción de los hinchas, el mediocampista entiende que la pasión ha hecho que no reaccionen bien: “Lo entienden desde un lado pasional. Te metés con el club o hacés algo que pueda perjudicarlo y lo toman mal. En realidad, son tus derechos como haría cualquier trabajador, pero en esta órbita se ve como algo malo. Uno no puede hacerles entender que está peleando como cualquier trabajador sus derechos”, enfatizó.

Para Cardacio la experiencia que vivió con este conflicto supuso un cambio en muchos sentidos.

“En lo profesional me afectó bastante. No solo la decisión que tomaron, sino que no nos dejaron entrenar en el club teniendo contrato vigente. Ese perjuicio que te genera para la carrera, el hecho de tener que entrenar solo y demás, obviamente que es muy grande y por eso fue que ganamos la especificidad del deporte”, sostuvo.

En su caso y en el de Matías Cabrera, no pudieron incorporarse a otro equipo por tener contrato vigente, sin embargo sus compañeros arreglaron como pudieron.

“La situación no era nada favorable porque salir de un conflicto dejaba entrever muchas especulaciones y quizás los compañeros tuvieron que, dentro de ese contexto, buscar lo mejor posible. No sé dónde estarían si no hubiese pasado lo que pasó, tal vez estarían en otro lado o en el mismo club”, reflexionó con claridad.

Más allá de lo profesional, hubo una parte emocional que tuvo incidencia: “Hubo muchísimo aprendizaje. Hizo que me diera cuenta lo que es la vida sin el fútbol, que capaz que no estoy tan lejos por los pocos años que me quedan de carrera. Pude disfrutar un poco más de la familia, de otras cosas, que a veces con la vorágine del resultado, de competir y demás, no nos damos ni cuenta y es un aprendizaje bien bueno. Muchas veces porque no convivimos con eso y haberlo vivido, más allá que fue por algo que no hubiese querido que pasara, sirvió muchísimo”, remarcó.

Esos cinco meses sin formar parte de un plantel, también le demostraron algo de lo que sabe que está más cerca: el retiro.

“Me mostró lo que es la vida sin el fútbol. Hay muchos jugadores que le temen a esa situación, porque se termina una vida; desde chiquitos estamos compitiendo, jugando todos los fines de semana para ganar y acostumbrados a entrenar todas las mañanas o las tardes, el vestuario y obviamente que esas cosas se van a extrañar”, destacó.

Sin embargo, aunque está preparándose con el curso de entrenador, aún tiene para más años sin colgar los botines. “Me estoy preparando, fue como una especie de adelanto, porque más allá que tengo 34 años y me siento bárbaro para seguir jugando muchos años más, también pongo en la balanza dónde y para quién jugar. En la vida para poder dar el máximo necesitamos cosas que nos motiven, que nos hagan sentir esas ganas de pelear y, en función de eso, también es uno elige o trata de buscarla la mejor posibilidad que tenga para ir a competir a un lugar”, aseguró.

Y concluyó: “Todo eso lo analicé en este tiempo, me sirvió para reflexionar muchísimas cosas y para disfrutar de otras tantas, que como dije antes, no lo hacía cuando estoy en competencia”.

Mathías Cardacio entró en la comisión directiva de la Mutual de Futbolistas Profesionales en las últimas elecciones del mes de abril. Sobre su nominación como parte de la lista 2018 y su llegada a la organización, reveló: “La propuesta llegó por toda la comunicación constante que generamos con este problema con Defensor”.

Y explicó: “Entré como suplente, porque por un tema de tiempo se me hacían muy difícil dedicar las horas necesarias para la cantidad de reuniones y cosas que hay para hacer”.

En tanto, destacó que comparte los valores de quienes lo convocaron: “Me siento identificado con la manera, sobre todo la forma en la que llevan adelante los diferentes tipos de situaciones que hay para con el jugador de fútbol. Ese relacionamiento que se generó por una cosa, llevó a la otra y bueno, dentro de la posibilidad y la propuesta que tuve de ellos, opté por ser un suplente en la lista”, concluyó.