Redacción El País
Se corrió toda la cancha. Al punto de que empezó como puntero y terminó como lateral izquierdo. Sacrificado por ayudar al equipo, Maximiliano Araújo reconoció que no la tuvo fácil en el Uruguay-Brasil de cuartos de final de la Copa América, pero terminó con una sonrisa.
Antes de irse del Allegiant Stadium, el futbolista de Toluca se detuvo en el pasillo y no pudo ocultar su felicidad al ser consultado por los periodistas. Ironizó con las posiciones en las que jugó y valoró el trabajo de todo el grupo. Así lo dijo: "Teníamos que hacer ese esfuerzo, sabíamos que enfrentábamos a un gran rival. Por momentos nos complicaron en la presión mano a mano, con (Lucas) Paqueta encontraron varias segundas pelotas.
"En el segundo tiempo pudimos mejorar un poco, salir más de contra, jugar en campo de ellos y cuando quedamos con 10 hacer ese gran esfuerzo de llevarlo a penales y, gracias a Dios, estamos en semifinales", analizó.
Sobre su desplazamiento en cancha, Araújo reconoció que no la tuvo fácil y acató el pedido de Marcelo Bielsa, quien en el entretiempo les dijo a los futbolistas que estaban demorando en pasar la pelota. "Tenia que ayudar mucho a Mati (Viña) porque Danilo se empezó a soltar un poco más, Savinho ya estaba abierto y había mucha gente por los dos lados. Gracias a Dios, pudimos defender el arco en cero, que era lo más importante".
"En el primer tiempo, cuando recibíamos el balón, tardábamos un poquito y eso fue lo que recalcó Marcelo. En los partidos anteriores no nos había costado como hoy (por ayer), pero sabíamos que iba a ser complicado", reconoció el futbolista de Toluca, que jugó los 90 minutos del partido en el que Uruguay empató 0-0 y terminó clasificando a semifinales de la Copa América tras imponerse 4-2 por penales.