Redacción El País
Peñarol sumó una gran victoria al superar 1-0 a Flamengo por la ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores de América en el Estadio Maracaná. El capitán del conjunto mirasol, Maximiliano Olivera, aseguró que el “planteamiento estaba claro”. “Fue no dejar jugar a los futbolistas de Flamengo”, señaló.
“Los delanteros hicieron un trabajo espectacular; estuvimos compactos y sufrimos mucho porque ellos tienen grandes jugadores que meten pelotas donde nadie las ve”, afirmó el lateral izquierdo que completó los 90 minutos en Río de Janeiro.
Olivera dejó en claro que Peñarol es un “equipo muy compacto que tiene una ayuda descomunal de los volantes”. “Lo importante es dejar todo y cuando se terminó el partido fuimos a agradecerle a la gente por lo que cantaron”, añadió.
El defensor de 32 años comentó en varios lapsos de la conferencia que la llave “es de 180 minutos” porque aún falta disputarse la revancha, que se llevará a cabo el jueves 26 de setiembre en el Estadio Campeón del Siglo, desde la hora 19:00, (ESPN y Disney+). “Para nosotros es importante jugar en nuestra casa porque se hace sentir mucha nuestra hinchada”, comentó.
Además, habló de un punto que destacó y mucho: la mentalización que tiene el grupo que encabeza el director técnico Diego Aguirre. “Hay una unión muy clara y un camino a seguir. Después este grupo tiene un corazón enorme, que siente al club, que tiene hambre de conseguir cosas y todo ha dado sus frutos”, señaló.
“Somos un grupo que está muy unido y deja el corazón todos los días no solo en los partidos por Copa Libertadores y por el Campeonato Uruguayo”, concluyó Olivera en la conferencia de prensa.
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