Redacción El País
Los presidentes de Nacional y de Peñarol, Alejandro Balbi e Ignacio Ruglio respectivamente, recibieron este domingo la notificación de que fueron citados por el Ministerio del Interior para una reunión de carácter urgente.

La cita se llevará adelante este lunes a las 14:30 horas en la sede de la cartera y los tendrá a ambos presente en representación de sus clubes, informó el programa Punto Penal (Canal 10) y confirmó Ovación. La idea del ministro Nicolás Martinelli es tratar la localía del próximo clásico, que está fijado para el 23 de marzo en el Estadio Campeón del Siglo.

Hasta el momento, hay diferencias entre tricolores y aurinegros acerca de la presencia de hinchas visitantes en ese compromiso. La posición de Ruglio es darle 2.000 entradas a Nacional y de esa manera se lo transmitió a Balbi en un encuentro que mantuvieron en Punta del Este el pasado 23 de febrero. El abogado, en tanto, es partidario de jugar sin visitantes o, de lo contrario, fijar el Estadio Centenario.

Los antecedentes del 2023 marcan que cada uno jugó en su propia cancha sin la presencia del público rival. De esa manera se hizo primero en el escenario mirasol y luego se repitió en el Gran Parque Central.

En las últimas horas, se produjo un contratiempo que podría inclinar la balanza a favor de Nacional en este sentido. Sucede que durante la previa al partido que ayer jugaron Peñarol y Cerro en el Campeón del Siglo se registraron incidentes que involucraron a las dos hinchadas y requirieron la intervención de la policía.

Si bien el cómputo marca que asistieron apenas 132 hinchas albicelestes, hubo varios que incumplieron con el operativo de seguridad previsto para el partido y que el mismo club publicó en la tarde del viernes.

Foto: Leonardo Mainé.

Según información brindada por el Ministerio del Interior a Ovación, la policía controló los incidentes en el entorno del Campeón del Siglo: “Según lo acordado por la Policía encargada del operativo y el Club Atlético Cerro, la hinchada de Cerro debía llegar hasta un punto previsto para desde allí ser trasladados hacia el estadio”.

“Ninguno de los parciales llegó a ese punto y decidieron acceder por su propios medios”, explicaron desde la cartera.

Eso provocó que se desenlazara una situación de violencia: “Al llegar un grupo de hinchas a las inmediaciones de ruta 102 y ruta 8, se produjeron incidentes con parciales de Peñarol, debiendo intervenir dos grupos de choque de la Guardia Republicana allí apostados. Como consecuencia de algunas pedreas un efectivo resultó con lesiones leves”.