Redacción El País
El mítico Estadio Maracaná de Rio de Janeiro recibió en la noche de este jueves el partido de idapor los cuartos de final de la Copa Libertadores de América entre Peñarol y Flamengo, que en el inicio del segundo tiempo tuvo una jugada más que polémica que el árbitro principal Jesús Valenzuela dejó pasar y el VAR no intervino.

Al momento de la incidencia, Peñarol iba arriba en el marcador por 1-0 gracias al gol que anotó en el primer tiempo Javier Cabrera, tras una excelente jugada colectiva a partir de un contragolpe perfecto del Manya.

Corría el minuto 51 de juego cuando el aurinegro llegó de nuevo al área rival. Leo Fernández conectó un centro pasado de cabeza y la mandó al medio, y la pelota la disputaron el futbolista uruguayo Jaime Báez y el chileno Erick Pulgar. En la dividida, la pelota pegó notoriamente en la palma de la mano del volante del Flamengo, que además la tenía completamente extendida.

Todos los jugadores de Peñarol que se encontraban cerca de la jugada protestaron desesperados al árbitro que cobrara penal, pero el venezolano desestimó la incidencia, quizás porque no la advirtió o porque esperó la comunicación desde la cabina del VAR, que lidera otro venezolano acompañado de dos peruanos: Juan Soto (VEN), Michael Espinoza (PER) y Jonny Bossio (PER).

Sin embargo, la comunicación no llegó o no lo consideraron penal, porque el árbitro no demoró más de 10 segundos en reanudar el juego.

Asimismo, como el que impacta el balón antes de que le diera en la mano es el propio Pulgar, los árbitros pueden haberse amparado en eso para no sancionar el penal a favor de Peñarol. Los árbitros tienen la potestad de interpretar si una jugada es penal o no si es el mismo jugador o un compañero el que le pega a la pelota previo a una mano dentro del área.

Ese ítem no se encuentra en el marco del reglamento, pero sí es una disposición que se les otorga a los árbitros al momento de interpretar la jugada y que puede haber llevado a que Valenzuela interprete que la misma no ameritaba ser sancionada.