Uno de los tantos chistes de Los Simpson muestra a un Homero escalador de montañas alarmado por la visión de la tremenda altura de la cumbre que debe alcanzar. Pero su interlocutor le advierte que esa no es la montaña que tiene que subir y le señala otra que está a su lado, todavía más impresionante.

Algo similar la ocurre a la selección uruguaya: para su partido de mañana ante Bolivia no debe ir hasta los ya temidos 3.582 metros del estadio Hernán Siles de La Paz, sino hasta los 4.150 del Estadio Municipal de la vecina ciudad de El Alto.

Los futbolistas extranjeros, pero quizás más los uruguayos, sufren cada vez que tienen que jugar en esas condiciones, donde el oxígeno escasea y la pelota viaja más rápido, donde los dueños de casa se sienten como pez en el agua y los visitantes parecen usar zapatos de plomo. En ese marco, cualquier punto que se logre sin dudas que es más que bienvenido.

No por casualidad nunca hubo amistosos Bolivia-Uruguay en La Paz: todos fueron juegos por torneos oficiales, sean las eliminatorias mundialistas o la Copa América.

Por el certamen continental, en realidad, hubo uno solo y lo ganó el local 1-0, por la edición 1997, donde llegó a la final.

Por eliminatorias se enfrentaron en La Paz 11 veces, con el saldo de seis triunfos locales, uno de Uruguay y cuatro empates.

AIZAR RALDES/AFP

La única vez que se ganó arañando las nubes fue en 2015, con goles de dos defensas: Martín Cáceres y Diego Godín.

Los empates se registraron en 1961, 2000, 2004 y 2009. En todos los casos, dejando hasta la última gota de energía en el césped. Y sufriendo mucho.

En otros casos se perdió ajustadamente o por amplio margen, más allá de que Uruguay llevara un muy buen equipo (como ocurrió en 1989 o 2012) o en crisis, como en las eliminatorias de 1994 y de 1997.

De los 10 partidos por Eliminatorias en la ciudad de La Paz, quedan estos cinco recuerdos.

Uruguay visitó La Paz por primera vez el 15 de julio de 1961, en las eliminatorias para el Mundial de Chile 62. La delegación llevó tubos de oxígeno para suministrar a los jugadores en el entretiempo. Los celestes comenzaron ganando con un gol de Luis Cubilla, pero los bolivianos empataron. Y luego vino la angustia: expulsaron a Ángel Cabrera, se lesionó Guillermo Escalada (por entonces no había cambios) y se aguantó el 1-1 como se pudo.

La ruta al Mundial de Argentina 78 parecía casi despejada porque los rivales iniciales eran Venezuela y Bolivia. Pero se empató en Caracas y después, el 27 de febrero de 1977, se perdió en La Paz por 1 a 0. No se jugó en el tradicional estadio Hernando Siles, que estaba siendo refaccionado, sino en la más chica cancha del Bolívar, el Simón Bolivar. Más tarde Bolivia ganaría sus dos partidos ante los venezolanos, liquidando toda la chance celeste.

Foto: archivo El País.

Daniel Passarella pidió llevar al plantel a la altura con dos semanas de anticipación para las eliminatorias 2002. Se siguió su plan y se sacó un empate a cero muy festejado. Fabián Carini tuvo atajadas fundamentales aquel 15 de noviembre de 2000. Pero sería el último partido del técnico argentino en Uruguay: renunció a comienzos de 2001 por diferencias con la AUF.

Dos goles en el primer tiempo por Marcelo Martins parecían dar la sentencia definitiva el 14 de octubre de 2008, por las eliminatorias para Sudáfrica 2010. Pero Uruguay reaccionó, metió a Bolivia en su arco -caso insólito en La Paz- y llegó al 2 a 2 con goles de Carlos Bueno y Sebastián Abreu. Y en la hora casi llegó el tercero, que hubiera sido toda una hazaña.

AIZAR RALDES/AFP

Fue el primer partido en el camino a Rusia 2018. Y resultó el mejor comienzo, porque se ganó 2-0, con goles de Martín Cáceres y Diego Godín, el 8 de octubre de 2015. Una firme defensa hizo el resto, para el encuentro más tranquilo que hayan disputado los celestes en La Paz.