Por Juan Pablo Romero.
En un abrir y cerrar de ojos Nacional metió en una semana tres victorias de forma consecutiva (contabilizando la de la Copa Libertadores contra Independiente Medellín) tras derrotar a Wanderers anoche por la mínima diferencia (1-0), en lo que fue el cierre de la jornada 12 del Torneo Apertura. Este resultado le permite a los tricolores seguir a cinco puntos de Peñarol cuando restan nueve por jugar, y continuar como escolta, ahora solamente junto a Cerro Largo.
Wanderers fue ampliamente superior a los tricolores en el primer tiempo, con claro predominio en los primeros 30 minutos, y transformó a Sergio Rochet en figura, con dos tapadas importantes para mantener el cero en el peor momento de su equipo.
Nicolás Fonseca y Francisco Cerro jugaron llamativamente bastante sueltos (el buen pie en el mediocampo es una de las fortalezas de los Bohemios), mientras que el local volcó su juego por la izquierda, con Gonzalo Camargo y Kevin Rolón, ya que Leo Pais no tuvo una buena noche en el Parque Viera y fue bien marcado por Camilo Cándido y Diego Polenta.
Así, Wanderers generó interesantes circuitos de juego de tres cuartos hacia adelante, con Diego Hernández moviéndose libre por todo el frente del ataque y con interesantes participaciones de Facundo Milán, que está mejorando. Un remate del nueve ante una arremetida de Rolón desencadenó la primera reacción del arquero de la selección, de igual forma que ante un tiro fuerte de Juan Acosta luego de una pelota recuperada por Hernández.
Parecía que el gol albinegro estaba al caer, Nacional no reaccionaba, no encontraba la pelota y tenía una actitud pasiva frente a la movilidad y el buen juego que mostraba Wanderers, equipo al que por momentos le faltó profundidad, algo recurrente en los últimos tiempos.
En el final del primer período, Gastón Pereiro -de muy floja actuación, con escaso aporte- tuvo un tiro libre al palo después de una falta cometida por Camargo contra Federico Martínez, que fue de más a menos en el juego y se fue apagando.
COMPLEMENTO. Aunque sin mostrar nada en ataque, Nacional ajustó las marcas en el segundo tiempo y casi que no pasó sobresaltos. El encuentro se hizo más parejo y casi que sin situaciones de gol claras. Pese a que Wanderers dominaba el balón, cada vez le costaba más profundizar y el partido se hizo aburrido, con un ritmo inferior al de los 45’ iniciales, en algo que no ayudó el árbitro Christian Ferreira, pues cualquier contacto en el área era cobrado como falta de ataque.
Hasta que sobre la hora Francisco Cerro hizo una tonta falta sobre Bruno Damiani -que tuvo otro buen ingreso- al borde del área y de ese tiro libre llegó el error de Wanderers y la avivada tricolor (ver nota secundaria) para que Polenta marcara el único gol del partido, el que le permitió a los Bolsos quedarse con su primer triunfo jugando de visitante en el certamen doméstico, justamente ante Wanderers, que apenas ganó una vez en sus seis presentaciones en el Parque Alfredo Víctor Viera.
Nacional jugó mal, aunque los resultados le están dando confianza y motivación. Ya son tres victorias al hilo.