Nacional ganó con lo justo, pero cumplió un objetivo primordial que puede llegar a agradecer al final de la temporada: recortó diferencias con Peñarol pensando en la Tabla Anual. Con gol de Ruben Bentancourt en la agonía del partido, se impuso y llegó a 31 puntos en el Torneo Apertura, donde quedó a siete puntos del campeón Peñarol.

Como si fuera una réplica de lo ocurrido ante Deportivo Maldonado, el local dominó la posesión y tuvo las mejores ocasiones de peligro, pero recién logró el cometido en el tramo final.
En el primer tiempo perdonó en las que tuvo: Gabriel Báez reventó el palo izquierdo a los 7‘ y después tuvo varias aproximaciones frente a un rival que se cerró bien con una línea de cinco defensores. ¿La más clara del anfitrión? La de Jeremía Recoba, que a los 41‘ tuvo un mano a mano con Mauro Goicoechea y definió mal.

Ya para el complemento hubo un punto de inflexión con el ingreso de Gastón González a media hora del final. El argentino fue desequilibrante por izquierda e hizo levantar al público en una tarde gélida.
Pero le seguía faltando la concreción de la jugada y el Chino lo intentó de todas las formas: entró Ruben Bentancourt para escoltar a Gonzalo Carneiro y luego se sumó Christian Ebere por derecha.

A nueve del final, llegó la hora de Federico Santander, que resultó decisivo: a los 83‘ se la bajó de cabeza a Bentancourt y el 9 hizo todo bien: la controló, se sacó de encima a Matías Fracchia con un sombrero y definió cruzado para estampar la victoria en una jornada especial para el mundo tricolor.

Foto: Estefanía Leal.

Justo en el día en el que el Gran Parque Central cumplía 124 años tras ser inaugurado el 25 de mayo de 1900, Nacional se dio el gusto de celebrar. “Erigido donde José Artigas fue proclamado ‘Jefe de los Orientales‘, el Gran Parque Central es el estadio más antiguo de América y el primer estadio de la FIFA”, dijo el club. Y añadió: “Desde 1900 a la fecha, en su campo han jugado más de 300 equipos extranjeros (clubes y selecciones)”.

Foto: Estefanía Leal.

En la previa de la visita a Libertad el próximo jueves por Libertadores, donde por más que ya está en octavos de final debe ganar para seguir en carrera hacia el Mundial de Clubes, el tricolor volvió a ser efectivo. Lo hizo sin Mauricio Pereyra, que tiene un cuadro gripal, y sin Mateo Antoni, que está en duda para la copa por un fuerte dolor en el tobillo. También tendrá el desafío de reemplazar al suspendido Polenta, por lo que el Chino tiene trabajo de sobra.