TRICOLORES

Una decisión institucional, basada en aspectos deportivos y de respeto a la camiseta, le significó a Nacional un gran beneficio económico. El hecho concreto que se provocó en materia de números, tras la determinación de no renovar diez contratos de futbolistas del plantel principal, es que el club ha conseguido llegar a un presupuesto histórico a la baja.

Sí, porque siguiendo la línea de conducción que empezó a regir desde el momento que la directiva asumió su mandato, el equilibrio económico se ha ponderado en esta ocasión de manera muy contundente.

Actualmente, y como consecuencia de la reducción de la masa salarial provocada por la finalización de diez vínculos, el club tiene un presupuesto aproximado de 350 mil dólares mensuales, lo que reportará de manera estimativa un ahorro de unos 400 mil dólares por los dos meses que se supone que regirá este plan.

Igualmente, hoy se acepta que los ajustes que se puedan hacer al plantel en un futuro próximo tampoco harán que el club se ubique cerca de los 550 mil dólares mensuales que supo tener antes de la referida reducción que se efectuó el pasado 31 de diciembre.

El efecto que se logró con la determinación de ser profundos con la depuración del plantel tuvo un alto impacto en el “paquete económico” porque esencialmente a Nacional lo dejaron de defender dos de los jugadores mejores remunerados del club.

Gonzalo Castro y Luis Mejíaestaban en la misma escala salarial que el goleador y capitán del equipo Gonzalo Bergessio, quien públicamente se separó de los actos de indisciplina en la burbuja sanitaria. También se consiguió una baja considerable con la partida del mediocampista argentino Claudio Yacob, cuyos haberes se ubicaban en una escala intermedia. Por debajo de los tres principales contratos, pero por arriba del resto de los futbolistas.

Si bien la dirigencia puso arriba de la balanza otros aspectos antes que el de los números para tomar algunas decisiones importantes, queda claro que este proceso de adaptación a la realidad económica de Uruguay se viene llevando adelante para lograr que el presupuesto de Nacional sea sustentable y no necesite estar pendiente de la realización de una gran venta.

A diferencia de lo que ocurría en el pasado, la dirigencia quiere llegar a un modelo de consolidación deportiva y económica y que el crecimiento sea sostenido y de manera paulatina.

De hecho, aunque se acepta que el equipo tendrá que recibir algunas mejoras para la temporada 2021, siempre se hace bajo el concepto primario de que la estructura salarial no sufrirá ningún quiebre.

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Actualmente se sabe que ni siquiera la llegada del talentoso Andrés D’Alessandro va a sacudir las arcas tricolores. Y que ningún otro jugador que pueda interesar provocará una determinación loca.

El plan ahorro, llegado el caso, y a partir de marzo, abril o mayo, podría verse reducido, pero nunca al grado extremo de evitar que haya más gasto del dinero que ingresa.

En las conversaciones informales que existen entre algunos directivos se considera que un ajuste a la alza del presupuesto podría estar cerca de los 450 mil dólares, lo que terminaría demostrando también que se siguió bajando con relación a lo que se invertía hasta diciembre de 2020.

En concreto, hasta que Nacional no agrande su plantel seguirá ahorrando dinero. Llenando la caja fuerte para poder invertir después.