Redacción El País
El clásico disputado el pasado sábado entre Nacional y Peñarol tuvo cuatro goles y muchas emociones, pero estuvo marcado por una acción que dejó consecuencias, como fue el momento en el que tras una infracción de Franco González a Yonatan Rodríguez, se dio un tumulto de jugadores.
Empujones, manotazos, insultos y cinco expulsados. Cuatro de ellos fueron jugadores porque no pudieron seguir en cancha Franco Fagúndez, Leonardo Coelho, Ignacio Suárez y Thiago Cardozo y el restante fue Nelson Abeijón, ayudante técnico de Álvaro Recoba en Nacional.
El Abeja fue expulsado y fue retirado por algunos de los futbolistas que estaban en el banco de suplentes. Mucho se habló de su reacción y este lunes, varias horas después de lo ocurrido se sinceró: "Necesitaba hablar, necesitaba decir que estoy arrepentido por lo que hice porque no es una imagen que di en mi vida".
"Como futbolista dejaba todo en la cancha y tuve muchos encontronazos, pero hoy en mi rol no puedo hacerlo. Mi intención fue entrar a separar, pero después pasaron cosas. No me comporté de manera correcta y no fue un ejemplo para el mundo del fútbol, ni para mis hijos", sentenció en diálogo con #Minuto1 de Carve Deportiva.
"Los hinchas pueden decir: 'Bien Abeijón', pero yo estoy super arrepentido. Nunca se esperaba algo sí de mi y por eso recibí mensajes de amigos y de mi familia para saber el motivo por el que había actuado así. No es lindo para el fútbol, no es un mensaje para la gente de lo que es el fútbol. Muy triste porque me considero una persona correcta en la vida y en el fútbol, me jugó en contra el amor que le tengo a Nacional y espero que algún día la gente lo entienda, no estoy de acuerdo con la violencia. Me duele la imagen que dejé" agregó.
"Se me partió el alma, lo que más me dolió fue por mis hijos. Enseguida que termina el partido sabía que no había hecho algo bien y una vez más tranquilo, no me perdoné. Le pido disculpas al mundo del fútbol y a mis tres hijos", agregó Abeijón.
Para el ayudante del Chino la decisión que tomó el árbitro "es normal. Cuando ve que uno está fuera de sí es justo que haga lo que hizo, luego pase lo que pase la suspensión la voy a aceptar. En lineas generales, estuvo bien lo que hizo el árbitro".
A su vez, también añadió que tuvo un diálogo con gente de Peñarol tras el encuentro: "Hice una llamada después del partido porque correspondía y fueron unas llamadas super claras, para que no se queden con esa imagen y me alcanzó".
Por último también habló con el entrenador tricolor y aclaró: "Hablé con el Chino, le pedí disculpas. Sabe que no estuve bien, pero es una de las personas que más me conoce y me entendió aunque sabiendo que no estaba bueno".
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