En enero de 2023, el delantero de Plaza Colonia y ex Peñarol, Nicolás Dibble, salió a préstamo del Pata Blanca con rumbo a la ciudad de Salvador de Bahía (Brasil) para sumarse al Esporte Clube Vitória. Aunque su contrato era por un año y terminaba el 31 de diciembre de 2023, el futbolista eligió rescindir y regresar a su Colonia natal para estar más cerca de su familia que no atraviesa un buen momento.
“Estaba en Brasil en Vitória y rescindí porque estaba jugando poco y había tenido una lesión. Tampoco veía mucho a mi hija, pasó lo de sobrino y sentí que la familia y mi hermana me necesitaban acá, estando más cerca”, explicó.
Dibble, dejó en Colonia a una niña de cinco años y a su familia, que el 31 de agosto de 2022 perdió a Benjamín, jugador de 14 años de las inferiores de Plaza Colonia e hijo de la hermana del delantero, quien murió en un accidente de moto. Y por eso regresó. Estos primeros días se los tomó para compartir con los suyos, dedicarle tiempo a su pequeña, llevarla y traerla a la escuela y entrenar por su cuenta.
El lunes deberá presentarse a entrenar con Plaza y deberá decidir qué hacer con su futuro. “Mi idea es volver a salir. Obviamente Plaza habló conmigo, que está en una situación difícil, complicada y la idea es que me quede con ellos, ayudar, a ver si se puede mantener en Primera División. Yo quiero mucho a Plaza, así que estoy definiendo si me quedo. Son muchos años en el club, logré muchas cosas y lo quiero. Creo que soy histórico para ellos y me siento parte, así que hablaré para ver qué va ser de mi carrera”, detalló.
En caso de no quedarse en el Pata Blanca buscará un destino cercano: “Vine acá y tenía la posibilidad de ir a Guatemala. Si decía que sí, ya estaba allá. Pero recién había llegado y no me había acomodado, así que resolví no ir. Mi idea es salir, pero a un lugar más cerca para poder volver a ver a mi familia”, aseguró.
En la danza de nombres aparecen algunos clubes de Primera División que están de mitad de tabla para arriba, pero prefiere no mencionarlos porque aún no hay nada en concreto. “Hay sondeos, porque saben que estoy en una situación en la que ahora volví a Uruguay y que estoy buscando equipo, aunque tenga contrato con Plaza. De todos modos el equipo me puede liberar, podemos arreglar el tema ese, no es un problema”, sostuvo.
¿Y Peñarol? El delantero jugó en el aurinegro en la temporada 2016/17 y confesó ser hincha del equipo. “Me han llamado de Peñarol, he tenido contactos. También tuve sondeos de Nacional. Son solo charlas, sondeos, pero es una posibilidad como hora estando acá. Yo sigo a disposición de algún llamado o lo que sea para conversar”, reveló.
En el pasado, protagonizó una polémica con el equipo Tricolor y hoy, con otra madurez, dice que no le pesaría jugar con ellos. “Los años pasan y uno entiende que es trabajo. La idea mía es que el equipo al que vaya yo sienta que me quiere, pregunta por mí y desea que esté ahí, no me interesa mirar si es Nacional o si es Peñarol, ahora. Veré lo mejor para mí y mi familia. A veces uno comete errores siendo joven, pero es un trabajo. El jugador que jugó en Nacional lo hace por trabajo y ahora es muy común eso, de jugar en los dos. Lo que busco es que me digan: ‘Mirá Nico te quiero’ y no voy a ver si es Peñarol o Nacional. Si realmente me interesa y tengo ganas, voy a ir”, remarcó.
“Mi idea es estar en un equipo que pelee cosas importantes, considero que puedo darle mi granito de arena a cualquier club que vaya para conseguir cosas importantes”, apuntó y agregó que sabe lo que puede aportar en cualquier equipo del medio.
La posibilidad de quedarse en Plaza Colonia es más afectiva que deportiva. “Gracias a Dios en Plaza siempre me fue bien. Salí campeón dos veces, ascendí dos veces. Estando en el club, siempre le fue bien. Entonces, estoy en eso de pensar que capaz que me quedo y el club se queda en la A”, subrayó.
Y reconoció: “Voy a hablar con la gente del club, a ver qué pretende, qué puede ofrecerme tanto para mí como para mi familia, y sino buscar otro rumbo”.
“En Plaza me quedaría por amor al club, para ayudarlo a quedarse en Primera División”, concluyó.
La salida al fútbol brasileño
La experiencia en el país norteño fue buena, más allá que la situación familiar pesó para que buscara la rescisión. “Fue una experiencia linda, en un fútbol diferente. El club estaba muy ordenado, incluso ahora está en la primera posición para ascender a serie A. Arranqué jugando, me fue muy bien y después tuve una lesión. Por desgracia estuve un mes y medio parado y me costó volver. Vino un técnico que trajo sus jugadores y estaba un poco tapado, entonces tuve la idea de estar cerca de mi familia, mi hija y poder volver a jugar. Sentía que estando ahí no iba a tener muchos minutos y decidí venirme”, reveló.
En total, el futbolista disputó 459’ con el equipo, jugando cuatro partidos de Fase de Grupos de la Copa do Nordeste y cinco del Campeonato Baiano, donde alcanzó a anotar un gol en los cinco encuentros en los que participó. En Serie B no llegó a jugar ningún minuto.
Sobre su opinión del nivel de la liga, indicó:“Va mejorando año a año, es una serie B muy buena, que es muy competitiva. Brasil es otro fútbol, con otra infraestructura. Me pareció muy, muy bueno. Me habían comentado que era muy buena, pero me sorprendió más aún cuando estuve cerca de todo y la viví”.
El Vitória, equipo del Nordeste brasileño en el Estado de Bahía, está ahora en posición para conseguir el ascenso. “Jugué con equipos buenos, como el Bahía, el clásico. Tuve una experiencia muy linda e incluso la Torcida, como le dicen allá a la hinchada, me querían mucho y no querían que me viniera. De hecho querían que el entrenador me diera más oportunidades, porque me habían visto condiciones. Creo que en el Vitoria no hice las cosas mal y di lo mejor”, remarcó.
En tanto, indicó que el campeonato brasileño le parece “una de las mejores ligas sudamericanas” y que si algún jugador tiene chance de sumarse a un equipo allá “le diría que no lo dude”.
“Me volví porque coincidieron y pasaron cosas, pero volvería a ir a un equipo brasileño”, concluyó.
Desde su regreso está dedicándole tiempo a su hija de cinco años. “Todos los días me levanto temprano, la llevo a la escuela, después entreno y la vuelvo a buscar. Más tarde salgo a correr, comparto unos mates con mi familia y paso con ellos”, comentó.