Redacción El País
Durante el encuentro de ida entre Nacionaly Boca Juniors por los octavos de final de la Copa Libertadores ocurrió una jugada que generó alarma en el Gran Parque Central: cuando corrían seis minutos de juego,Diego "Torito" Rodríguez, volante tricolor, protagonizó una disputa normal de pelota con Cristian Medina, jugador del Xeneize, y tras un empujón cayó tendido con la cabeza sobre el césped generando preocupación.

Foto: Nicolás Pereyra.

Sus compañeros de acercaron de inmediato y no tardaron en hacerle la seña al médico para que entrara a la cancha atenderlo. El Torito se paró por sus propios medios y ya parecía recuperado, pero desde sanidad le indicaron que lo más oportuno era salir de la cancha. Y el experimentado mediocampista se alteró: en primera instancia le respondió al profesional con un simple: "No, no salgo".

Y luego, cuando ya estaba en la zona del banco de suplentes pensando en que era cuestión de minutos para que pudiera reingresar, recibió la noticia de que Álvaro Gutiérrez había decidido sustituirlo: "¡No me saqués! ¿Qué cambio?", expresó con ahínco.

El DT tricolor comprendió sus ganas de seguir aportándole al equipo desde el campo de juego y le trató de transmitir tranquilidad. Luego, sus propios compañeros lo calmaron y se pudo ver a Emmanuel Gigliotti hablándole mucho en el banco de suplentes.

A los 10 minutos de juego fue el turno del ingreso de Thiago Helguera, la joya de 17 años de Nacional. El tricolor prefirió salvaguardar la integridad del futbolista y prevenir todo tipo de riesgo, sobre todo porque impactó la forma en la que Rodríguez cayó sobre el césped sin poder colocar las manos a pesar de que no había sufrido un golpe desmesurado y simplemente se trató de un roce normal en la disputa por la pelota.