De novela: la primera fase de Nacional en la Copa Libertadores fue para encuadrar

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Emiliano Martínez y un buen rendimiento. FOTO: Conmebol.

TRICOLORES

"Terminar en el primer lugar es cumplir con la historia y el prestigio que tiene Nacional", indicó Jorge Giordano, técnico tricolor.

Ganó cinco de seis partidos. Se quedó con los tres puntos en los tres encuentros jugando en condición de visitante. Por momentos tuvo muy buenos rendimientos en lo colectivo. Anotó nueve goles, que se repartieron entre seis futbolistas. Apenas le hicieron tres tantos. Potenció juveniles e incluso algunos debutaron en la Primera de Nacional. Así fue la primera fase de los tricolores en el Grupo F de la Copa Libertadores: de novela.

Si bien terminó siendo una llave sumamente despareja, con dos equipos como Estudiantes de Mérida y Alianza Lima que demostraron estar muy lejos del nivel de Copa Libertadores (principalmente los peruanos), Nacional logró confirmar esas diferencias y reflejarlas en la tabla de posiciones al terminar con 15 puntos al igual que Racing y superando a los argentinos por diferencia de goles.

Jorge Giordano fue claro en la conferencia de prensa que se hizo a distancia apenas finalizado el juego: “Acá hubo un camino recorrido, hay que resaltar lo que hizo Gustavo (Munúa) y su cuerpo técnico. Nosotros retomamos lo que ellos empezaron de forma positiva. Terminar en el primer lugar es cumplir con la historia y el prestigio que tiene Nacional”. El actual entrenador no se olvidó de los buenos resultados que sacó el equipo bajo la conducción de Munúa, ni tampoco lo que la historia de Nacional manda.

Los tricolores hicieron su trabajo y ahora el sorteo de mañana será el que le dará suerte (o no) para el rival de los octavos de final. Pero al finalizar como líder, evitó a varios de los “pesados”, si bien alguno quedará en el bombo dos, el de los que terminaron en la segunda posición.

Anoche el tricolor volvió a ser un equipo sólido y jugó un muy buen primer tiempo.

Jorge Giordano respaldó a la oncena que le había ganado a Fénix el domingo, solo con la variante de Agustín Oliveros (a la orden tras la cuarentena y el resultado negativo del hisopado) por Guzmán Corujo, que si bien los resultados de los estudios dieron tranquilidad, continúa en sanidad.

Los tres futbolistas de la mitad de la cancha (Emiliano Martínez, Gabriel Neves y Joaquín Trasante) volvieron a ser el motor y el termómetro del equipo. Sin lugar a dudas, desde que tomó la conducción del equipo es el mayor acierto de Giordano, porque le dio al equipo mayor verticalidad, más dinámica y un mejor manejo de pelota.

Ayer en particular el nacido en Santa Lucía se destacó sobremanera, porque se animó a salir a romper arriba (presión alta) y generó varios robos propicios, que terminaron con jugadas de gol para Nacional en la tarde-noche del Gran Parque Central.

A diferencia de lo que había ocurrido contra Fénix, Rodrigo Amaral jugó más volcado a la derecha y Alfonso Trezza lo hizo en la izquierda y tiene una explicación: “El viento jugaba un papel preponderante y el primer tiempo lo teníamos a favor; Rodrigo, a pierna cambiada, tenía más posibilidades de rematar, más cancha para asistir y se pudo ver que fue lo que pasó. Por su buen rendimiento, en el segundo tiempo lo dejamos por ahí”, explicó el entrenador albo.

Precisamente, gracias a una recuperación del 10 y un pase en largo a Gonzalo Bergessio, llegó el primer gol de Nacional a los 7’ tras una notable acción individual del capitán.

Por una mano de Oliveros en el área, Sergio Rochet se vistió de héroe porque evitó el gol de penal de Alianza Lima, que hubiera sido el empate parcial en un momento que no lo merecía porque Nacional jugaba mejor.

Mathías Laborda, que volvió a ser el lateral derecha de Nacional (¿ahora quién lo saca?) se la pasó a Neves, el 8 mandó la pelota al área, la peinaron y Trezza marcó su primer gol en Nacional. Ese fue el tanto que a la postre le terminó dando el primer lugar del Grupo F a los tricolores, que se ilusionan con seguir en la Libertadores y poder alcanzar los cuartos de final.

En el complemento Nacional se quedó, Giordano hizo cambios y apostó a mantener la diferencia sin recibir goles y el objetivo se cumplió.

Nacional se muestra fuerte apenas dos partidos después de la derrota de la final del Apertura a manos de Rentistas. Los vientos son cálidos para los tricolores, que pretenden seguir creciendo como equipo.

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