AURINEGROS
La postergación de la fecha le vino bien al zaguero, que mejoró y apunta al duelo del sábado con el líder del Torneo Apertura.
Tras las dos victorias consecutivas, incluida la del clásico, Peñarol recuperó la tranquilidad puertas adentro de Los Aromos. De todos modos, hay un tema que preocupa y ocupa: el sanitario. Y mucho más teniendo en cuenta que el próximo sábado (a las 18.00 horas en el Campeón del Siglo) enfrentará a Deportivo Maldonado buscando acortar los cinco puntos de diferencia que hoy lo separan de lo más alto del Torneo Apertura.
La lista de descartados es amplia, pero en las últimas horas una buena noticia que empieza a tomar forma: Ramón Arias evoluciona favorablemente y hay optimismo para que Mauricio Larriera pueda contar con él.
El zaguero, que estuvo como titular en todos los partidos del campeonato y también en la Supercopa Uruguaya, salió sustituido el pasado 5 de marzo ante Danubio cuando iban 61 minutos de juego. Una fuerte contractura en la zona de aductores lo sacó del encuentro. Si esa fecha no se hubiera suspendido ese sábado a la noche, como consecuencia de las amenazas recibidas por los árbitros, Cachila no hubiese jugado este último fin de semana ante Deportivo Maldonado. Sin embargo la postergación del complemento de la quinta jornada y por ende el corrimiento la sexta para el fin de semana que viene, que derivó en estos 14 días sin actividad oficial para Peñarol, le cayó como anillo al dedo.
El zaguero de 29 años ya dio señales positivas sobre el cierre de la semana pasada y se espera que en estos días intensifique trabajos y obtenga el alta médica, confiaron a Ovación fuentes aurinegras.
El último sábado, aprovechando el parate, Peñarol hizo fútbol ante Cerro para seguir tomando rodaje. Arias no estuvo en ninguno de los dos equipos que paró el entrenador. Se ubicó en la Tribuna Henderson a seguir a sus compañeros.

Los que sí están descartados para el encuentro ante los fernandinos son: Hernán Menosse (esguince de ligamento lateral interno), Agustín Canobbio (cuádruple fractura en el rostro) y Agustín Álvarez Martínez (rotura fibrilar en recto anterior de cuádriceps).
A Menosse le quedan dos semanas de recuperación y a Canobbio cinco. En el caso del canario, en tanto, Peñarol anunció el desgarro el pasado 9 de marzo. Si completara los 21 días de recuperación establecidos en este tipo de lesiones, volvería para la primera semana de abril. De todos modos, en el club dejan la puerta abierta para que pueda volver antes a la orden del DT debido a que se trató de una lesión pequeña.
Todos estos casos se suman a los de Thiago Cardozo (ligamentos cruzados), Valentín Rodríguez (fractura con desplazamiento de rótula en la rodilla) y Ezequiel Busquets (fractura en el hueso escafoides del puño izquierdo). Los tres jugadores, que debieron ser intervenidos quirúrgicamente, ya comenzaron la temporada 2022 en sanidad.
El otro que tampoco podrá estar contra Deportivo Maldonado, aunque no tiene que ver con un tema sanitario, es Pablo Ceppelini. El volante fue sancionado con tres encuentros por la expulsión en el clásico. Ya cumplió uno (ante Danubio), el segundo lo hará el próximo sábado y luego Peñarol, cumplida más de la mitad de la sanción, pedirá la reducción de la pena. De ese modo, se apunta a que pueda jugar en la fecha 7 contra Rentistas.
El 11 que asoma para el sábado
Si bien la semana recién comenzó y Larriera aún tiene tiempo como para armar el rompecabezas ante estas bajas, ya hay una idea del 11 que puede poner en cancha. Kevin Dawson estará en el arco. En el fondo jugarán Matías Aguirregaray, Ramón Arias, Edgar Elizalde y Juan Manuel Ramos. Si no llega Cachila, en su lugar ingresaría Agustín Da Silveira. En el mediocampo irán Walter Gargano y Damián Musto en la zona de contención y Bryan Olivera, Ignacio Laquintana y Federico Carrizo en la de creación. El argentino debutó ante la Franja, dejó buenas sensaciones y el sábado pasado hizo fútbol en el amistoso ante Cerro. Arriba continuará Ruben Bentancourt.