Peñarol prepara una final especial por varios motivos. Porque será la primera que dispute por el Torneo Intermedio, porque será un clásico ante Nacional y porque se da a solo 13 días del inicio de la serie de Copa Libertadores ante The Strongest.

“Que sea un clásico está divino, y que sea un clásico es un problema”, dijo el presidente Ignacio Ruglio. Y agregó: “Capaz que si la final no hubiese sido un clásico, jugaríamos con suplentes”.
¿Qué opciones baraja Diego Aguirre para el clásico? El entrenador aurinegro deberá suplir la baja por suspensión de Gastón Ramírez, su capitán.

Y la principal duda pasa por saber qué esquema táctico utilizará. En los últimos dos partidos ante Fénix y Defensor Sporting optó por cambiar su tradicional 1-4-2-3-1 por un 1-4-4-2 con Batista y Silvera en la ofensiva. Sin embargo, en el complemento del cruce ante el Tuerto sacó al 21 y volvió al origen con Lucas Hernández jugando de extremo por izquierda. Esta última parece la opción más probable considerando el gran rendimiento del lateral-volante y su historial clásico.

En la mitad de la cancha resta saber quién será el acompañante de Damián García. Según pudo saber Ovación, Ignacio Sosa ya está recuperado y a la orden, por lo que puede ser una opción. La otra implicaría un cambio de posición y un ingreso: Javier Méndez pasando al medio y Leo Coelho acompañando a Guzmán Rodríguez en la zaga.

En cuanto a sanidad, la visiones son dispares en la interna del Mirasol; algunos indican que “Leo Sequeira y Darias se encuentran bien y después Diego dirá para qué están” y otros son menos optimistas al considerar que “están algo más complicados para llegar al clásico”, por lo que también podrían guardarlos para la copa.

Cabe recordar que el 16 de julio se confirmó que Sequeira sufrió un esguince de rodilla que lo mantendría al margen durante un lapso aproximado de tres semanas.

Desde entonces han pasado solo 16 días y serán 20 hasta el clásico, por lo que resulta poco probable que pueda tener una participación alta en cuanto a minutos disputados por el riesgo de resentirse de la afección.

En el caso particular de Darias se trató de una lesión de rodilla no grave que le demandaría unas dos semanas desde aquel 23 de julio cuando se anunció la noticia. Llegará al clásico con 12 días de recuperación y el escenario más probable es que esté a la orden para la ida ante The Strongest el próximo miércoles 14 de agosto cuando los reciban en un Estadio Campeón del Siglo repleto.

Peñarol fija la mira en el clásico, pero de reojo administra cargas físicas y minutos para su gran propósito.