Redacción El País
Entre los lampazos, el desastroso cierrede Peñarol en la Sudamericana y la lluvia torrencial de Bogotá, la famosa gallina inflable se hizo presente en la caída 3-1 ante Millonarios.

Pese al clima y el mal momento del equipo en la tabla, unos 300 fanáticos aurinegros viajaron a ver a su equipo y mostraron el infable blanco, azul y rojo que lleva la palabra "hijos", objeto que molestó a los hinchas locales.

Cuando el inflable empezó a correr por la tribuna, la parcialidad de Millonarios creyó que se trata de una broma hacia ellos, pese a que abajo se encontraba un cartel que hacía explícito que se trataba de un mensaje para el tricolor. "Nacional gallina vigilante", se podía leer en negro sobre tela blanca.

Mientras los hinchas uruguayos entonaban la canción "Sos la gallina", los locales le respondían con gestos y otros cantos.

La molestia tendría que ver con que "Millo", la mascota de Millonarios, es un águila y, salvando las distancias entre ambas aves, en una primera impresión podrían haber pensado que se trataba de una ofensa.

Lejos de dirigirse a los hinchas del rival colombiano, los hinchas aurinegros continuaron la tradición de llevar el inflable que salió a la luz por primera vez en un clásico en el Estadio Centenario el 11 de mayo de 2008.