Redacción El País
Peñarol y Leo Fernández volvieron al gol. Fue en el minuto 57 ante Juventud de las Piedras por la octava fecha del Torneo Apertura en el Parque Artigas. El tanto significó el regreso al festejo de un Mirasol que estuvo 388 minutos sin anotar.

Fue su primera vez de Fernández con la camiseta 10 (tras usar la 8 en 2024), que marcó desde los doce pasos tras un penal que fue cobrado por el VAR y que le devolvió la confianza al jugador luego no poder convertir el que pateó ante River Plate.

Hasta ese fallo, Fernández venía con una racha positiva desde los doce pasos dentro de los 90 minutos. Desde que llegó a Peñarol ya había convertido por esta vía, dos veces a Liverpool y Rampla Juniors y una vez a Cerro, River Plate y Wanderers. En toda su carrera, Fernández ejecutó 23 penales y falló ocho, contando los dos de la definición del Torneo Intermedio, fuera del tiempo regular.

En lo que respecta solo al 10, su último gol fue ocho fechas atrás ante Fénix, el día que Peñarol se consagró Campeón Uruguayo 2024. En lo que respecta a su cuenta personal, si se contabiliza la Supercopa Uruguaya y el Apertura, debió esperar 720 minutos.

Fernández hizo que los hinchas vuelvan a festejar luego de tres derrotas consecutivas y sin convertir goles. El último había sido el de Eduardo Darias a los 29 minutos del juego ante el Darsenero. Desde ese momento, pasaron 388 minutos, sin contar los descuentos de cada partido.

Peñarol pudo sostener el resultado y amplió la diferencia a 2-0 con el gol de Nahuel Herrera. Hasta el gol del debutante, tuvieron que pasar 406 minutos para que Peñarol volviera a convertir un gol en acción de juego y no de penal como fue el de Fernández.

Foto: Estefanía Leal.

También rompió una mala racha en la que comenzaba ganando y luego le empataban el partido, como le ocurrió en el clásico ante Nacional, ante Boston River y River Plate. A su vez, volvió a ganar luego de seis partidos.